El parón de Stellantis Vigo coloca en “stand by” a las auxiliares y empresas de componentes, que bajaron su producción a la mitad. La crisis afecta además a Ford, Mercedes, Renault o Seat, también paradas y para las que trabaja la industria viguesa
La automoción viguesa está en “stand by” con la empresa principal (Stellantis Vigo) parada hasta nuevo aviso, varias empresas auxiliares también sin actividad y todas las empresas de componentes aplicando ERTES y con muy bajo nivel de trabajo por la crisis de los microchips.
Los proveedores de primer nivel (unas 30 firmas que suministran directamente a Stellantis) están en un 30-40% de su capacidad productiva y el resto a un 60%, según estima la patronal metalúrgica gallega, Asime, que recuerda que no sólo se ven impactadas por la fábrica automovilística viguesa sino por otros constructores como Ford, Renault, Mercedes o Seat que también están parados. “En estos momentos nos está impactando de una manera muy relevante a las empresas de automoción de toda Galicia por el parón de Stellantis que hasta ahora se ha ido salvando”, indica Celso Carnero, responsable de la federación comarcal de industria de CC OO.
Prácticamente todas las empresas están aplicando ERTES que afectan en estos momentos a entre 10.000 y 15.000 trabajadores; es decir, la mitad del total de empleados del sector en Galicia que supera los 22.000. Las auxiliares más afectadas son aquellas que trabajan en exclusiva para la factoría de Balaídos como son la fábrica de Plastic Omnium, Faurecia Asientos y Lear Asientos o Faurecia Escapes, entre otras. A expensas de las decisiones del Grupo Stellantis (con una fuerte influencia desde Milán por el peso de Fiat tras la fusión), la parada de la producción en el sistema 1 -donde se montan el 2008 y los sedanes- se prolongará al menos hasta el próximo viernes y la inactividad en el sistema 2 -donde se ensamblan las furgonetas y el monovolumen- hasta el domingo 30, aunque podría prolongarse más en el tiempo si continúan los problemas de desabastecimiento de componentes que llevan incorporados “chips”. El Clúster de Automoción de Galicia (Ceaga) así lo constata señalando queel segundo trimestre será peor que el primero y la foto fija que muestra el sector lo corrobora: ayer la fábrica automovilística viguesa estaba cerrada a cal y canto, ni siquiera trabajó el equipo de mantenimiento (vuelve hoy), y el polígono de Balaídos está a medio gas, algo insólito.
