El abogado de los accionistas minoritarios de Pescanova, Joaquín Yvancos, confirmó ayer que 'con toda probabilidad' pedirá el ingreso en prisión o la retirada del pasaporte de Manuel Fernández de Sousa tras 'escuchar atentamente' su declaración ante el juez Ruz, prevista para el 1 de julio, así como del consejero Paz Andrade, ambos imputados.
Yvancos dice que hay 'motivos suficientes' para que ambos -imputados por el juez por falseamiento de informaciones económicas y de las cuentas y por uso de información relevante- vayan a la cárcel. 'Hay falsificación de contabilidad, ha ocultado pruebas, ha colocado a gente afín en las filiales, quiere controlar la sociedad a través de las filiales y es una persona que tiene intereses fuera del país', indicó en una entrevista a Radio Galega en referencia explícita al presidente de la multinacional.
El letrado auguró que, tras la imputación de Sousa, Paz Andrade y otros dos accionistas, 'la gente que queda va a contar la verdad de todo, para salvarse', por lo que prevé que salgan a la luz 'verdaderas atrocidades contables'.
Con respecto a su primera aparición pública, el jueves en la Cadena Ser en Madrid, Yvancos dijo que responde a una 'estrategia de defensa para lavar su imagen'.
CRÉDITO URGENTE
La banca atrapada en la deuda de Pescanova -se estiman más de 3.500 millones de euros- mantiene su apuesta por la continuidad de la compañía viguesa y quiere firmar la inyección de liquidez, por importe de 55 millones de euros, antes de que termine este mes, según informaron a Europa Press fuentes conocedoras del proceso. Los bancos españoles integrantes del 'stering committee' (Bankia, Sabadell, Popular, NCG Banco y Caixabank) retomaron ayer los contactos -mediante una 'call conference'- para impulsar la operación con el fin de concretar una hoja de ruta en la que se fijen las condiciones y aportaciones de cada uno y que darán a conocer a otras entidades como Santander, BBVA y Bankinter, en principio más receptivas en sumarse a este crédito. Por su parte, las extranjeras muestran un compartamiento diferente, ya que mientras que Royal Bank of Scotland ha desistido de su intención de socorrer a la compañía, Deustche Bank no ha descartado un posible respaldo. Deloitte ha sondeado a Rabobank, Banco Espirito Santo, Ubi Banca, Liberbank, Bankinter, Santander y BBVA, aunque sólo estas tres últimas estarían dispuestas a respaldar una nueva financiación. Son 55 millones que se destinarían a financiar circulante y al pago a proveedores.
El letrado auguró que, tras la imputación de Sousa, Paz Andrade y otros dos accionistas, 'la gente que queda va a contar la verdad de todo, para salvarse', por lo que prevé que salgan a la luz 'verdaderas atrocidades contables'.
Con respecto a su primera aparición pública, el jueves en la Cadena Ser en Madrid, Yvancos dijo que responde a una 'estrategia de defensa para lavar su imagen'.
CRÉDITO URGENTE
La banca atrapada en la deuda de Pescanova -se estiman más de 3.500 millones de euros- mantiene su apuesta por la continuidad de la compañía viguesa y quiere firmar la inyección de liquidez, por importe de 55 millones de euros, antes de que termine este mes, según informaron a Europa Press fuentes conocedoras del proceso. Los bancos españoles integrantes del 'stering committee' (Bankia, Sabadell, Popular, NCG Banco y Caixabank) retomaron ayer los contactos -mediante una 'call conference'- para impulsar la operación con el fin de concretar una hoja de ruta en la que se fijen las condiciones y aportaciones de cada uno y que darán a conocer a otras entidades como Santander, BBVA y Bankinter, en principio más receptivas en sumarse a este crédito. Por su parte, las extranjeras muestran un compartamiento diferente, ya que mientras que Royal Bank of Scotland ha desistido de su intención de socorrer a la compañía, Deustche Bank no ha descartado un posible respaldo. Deloitte ha sondeado a Rabobank, Banco Espirito Santo, Ubi Banca, Liberbank, Bankinter, Santander y BBVA, aunque sólo estas tres últimas estarían dispuestas a respaldar una nueva financiación. Son 55 millones que se destinarían a financiar circulante y al pago a proveedores.
