Los ataques de los inversores provocan la escalada de las primas de riesgo europeas y el desplome de las principales bolsas

Aumenta la presión sobre España e Italia tras el adiós de Berlusconi

EFE
La dimisión del primer ministro italiano y su relevo al frente del Gobierno no evitó que la presión de los mercados aumentara ayer sobre Italia y, ante el temor a un posible contagio, sobre España, que situaba su prima de riesgo en un nuevo récord desde la creación del euro al cerrar la sesión en 432 puntos básicos ya que persiste la desconfianza hacia los países periféricos de la Unión Europea
Los inversores optaron un día más por reducir sus posiciones en renta variable, con lo que la Bolsa española cayó un 2,15 %, al tiempo que se deshicieron de deuda periférica, provocando que la rentabilidad del bono español a 10 años cerrara en 6,11 %. Ese alto interés, que condicionará las próximas subastas del Tesoro español, contrasta con el de la deuda alemana, que cayó hasta 1,78% por demanda de los inversores, y amplió el sobrecoste de comprar bonos españoles en vez de germanos.

Además de la rentabilidad de la deuda española, también subió la de los bonos italianos, y en menor medida la de griegos, belgas, austríacos e incluso franceses, y la prima de riesgo de todos estos países respecto a Alemania.
La prima de riesgo es la diferencia entre el interés que se pide a la deuda emitida por un país cuyos activos tienen mayor riesgo respecto de otro libre de riesgo. En el caso de España y del resto de países de la UE, la prima de riesgo es el sobrecoste que exigen los inversores por comprar bonos . En una situación de crisis el incremento de la prima de riesgo supone además un lastre para la recuperación económica.

Un mensaje claro A juicio de los expertos, las ventas masivas tanto en los mercados de deuda como en los de renta variable trasladaron ayer el 'mensaje claro' de que no vale sólo con cambiar al jefe de un Ejecutivo, sino que urgen a anunciar y aplicar reformas que reconduzcan la situación cuanto antes. Por eso, ni la llegada al poder en Italia de un tecnócrata ni el inminente relevo en la presidencia del Gobierno español, ante las elecciones del próximo domingo, han servido para reducir la presión sobre Europa.

Así, la mayoría de las bolsas europeas comenzaron a desplomarse y al final de la sesión, la española fue la que más perdió, al retroceder un 2,15 %, mientras que la italiana se dejó el 1,99 % y la de París, el 1,28 %.

Te puede interesar