El ministro de Economía asegura que 'en principio' no se procederá a liquidar ninguna entidad

El 'banco malo' tendrá 15 años para vender los activos tóxicos

El titular de Economía, Luis de Guindos. (Foto: EMILIO NARANJO)
El Gobierno aprobó ayer su tercera reforma financiera, que entre otras novedades crea un 'banco malo', una sociedad que podrá vender los activos tóxicos de la banca en hasta 10 ó 15 años y que estará controlada por inversores privados, que podrán contar con ayudas públicas para financiar su entrada.
Según el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, la reforma financiera nace con el objetivo de ser uno de los 'elementos fundamentales para salir de la crisis' y que 'no cueste un euro al contribuyente'. Precisamente, el 'mal llamado banco malo', ya que según De Guindos comprará 'activos no tan malos', tendrá como principal objetivo no incurrir en pérdidas, gracias a los bajos precios que pagará cuando compre los activos en el mes de diciembre (se constituirá un mes antes).

Fuentes de Economía aseguraron que esos precios podrían ser incluso más bajos que los que tienen provisionados las entidades financieras, de modo que habrá 'perspectivas de rentabilidad adecuada' para atraer a inversores privados.

Como contrapartida, los bajos precios -que fijará en última instancia el Banco de España- pueden suponer un 'esfuerzo o pérdida adicional' para la banca, que 'no puede ser significativa' dados los elevados saneamientos realizados.

El capital inicial será aportado por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) con parte de los 100.000 millones de euros aportados por Bruselas para sanear el sistema financiero, aunque el organismo no podrá alcanzar en ningún caso el 50% de las acciones. El banco malo, que entrará en funcionamiento en noviembre, pagará a las entidades financieras con efectivo, acciones o deuda avalada por el Estado que podrán descontar en el BCE.

La reforma aprobada ayer cumple los 'compromisos' acordados con Bruselas para conceder la ayuda de hasta 100.000 millones al sector financiero y, por ello, tiene como fin que el coste de la reestructuración y liquidación de entidades sea soportado por sus accionistas y acreedores para 'minimizar el impacto en los recursos públicos, es decir, en el dinero de los contribuyentes', en palabras del ministro de Economía.


LIQUIDACIÓN ENTIDADES

En este sentido, De Guindos, descartó 'en principio' la liquidación de alguna entidad financiera en los próximos meses, y resaltó la necesidad de esperar a conocer las necesidades de capital que fijarán las consultoras independientes dentro de unos quince días.

Asimismo, la reforma pone coto a las remuneraciones de los responsables de las entidades financieras que necesiten ayuda pública, que bajará así de un máximo de retribución fija de 600.000 euros a 500.000 euros. La reforma también eleva los requisitos de capital de las entidades, que serán del 9%, frente al 8% exigido para las entidades cotizadas y el 10 % para las que tuvieran demasiada financiación mayorista.

El Gobierno elevó la capacidad de endeudamiento del FROB, que pasará de 120.000 millones para 2012, a los 90.000 millones establecidos anteriormente.

Te puede interesar