Admite que el pacto será a la baja y pide que el fondo contra el paro juvenil entre en vigor lo antes posible
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, ha pedido este miércoles a los líderes europeos que superen sus diferencias y lleguen a un acuerdo sobre el presupuesto de la UE para el periodo 2014-2020 en la cumbre que empieza este jueves porque un nuevo retraso enviaría 'un mensaje muy negativo' que podría amenazar la recuperación económica.
Barroso ha defendido un presupuesto 'ambicioso' que sirva como 'instrumento de inversión' y 'solidaridad', especialmente en las regiones más afectadas por la crisis. También ha reclamado que el nuevo fondo para combatir el paro juvenil que se incluirá en las perspectivas financieras entre en vigor 'lo antes posible'.
No obstante, el presidente de la Comisión ha admitido que cualquier pacto entre los Veintisiete será a la baja respecto a las pretensiones del Ejecutivo comunitario y la Eurocámara y ha acusado a los líderes de preocuparse sólo por los retornos nacionales y no por la dimensión europea.
'Pido a todos los jefes de Estado y de Gobierno que superen sus diferencias y vengan a Bruselas con un espíritu de compromiso y responsabilidad europea para que pueda encontrarse un acuerdo político', ha dicho Barroso en un discurso ante el pleno de la Eurocámara para preparar el Consejo Europeo del 7 y 8 de febrero.
'Un nuevo retraso enviaría un mensaje muy negativo en este tiempo de recuperación económica frágil. El riesgo es que las posiciones se endurezcan y resulten incluso más difíciles de superar', ha resaltado el alto funcionario europeo.
'Como muchos jefes de Estado y de Gobierno se centrarán en sus prioridades nacionales y lo que ven como sus sobres nacionales -mi experiencia es que la mayoría de los Gobiernos hablan más de sus sobres nacionales que de la perspectiva europea- yo lucharé enérgicamente para preservar la dimensión europea del presupuesto', ha asegurado Barroso, que ha puesto como ejemplo los fondos para infraestructuras, investigación, pymes o para el programa Erasmus.
'No cualquier acuerdo es un buen acuerdo', ha avisado el presidente del Ejecutivo comunitario. A su juicio, cualquier compromiso debe preservar además las ayudas para las regiones y las subvenciones para la política agrícola común.
RESPUESTA A LA CRISIS
Además, el presupuesto de la UE debe ser 'una parte indispensable de nuestra respuesta a la crisis económica y social', en especial al paro. 'Hay Estados miembros que no tienen recursos para apoyar a sus trabajadores cuando una empresa decide trasladarse o para ocuparse de los más desfavorecidos', ha indicado Barroso.
'Pido a los jefes de Estado y de Gobierno que no pierdan esta oportunidad de usar el presupuesto europeo para combatir el paro juvenil', ha reclamado, tras recordar que éste afecta a 25 millones de personas en toda Europa. 'Una iniciativa para el empleo juvenil sería un poderoso signo de solidaridad y valor añadido a nivel europeo. Es muy importante que entre en vigor lo antes posible', ha apuntado.
El presidente de la Comisión ha defendido además que se mantengan las ayudas europeas a los países más pobres porque 'suponen la diferencia entre la vida y la muerte'.
En todo caso, Barroso ha acabado reconociendo que 'está claro que cualquier acuerdo entre los jefes de Estado y de Gobierno será desafortunadamente más bajo que lo que la Comisión y este Parlamento desearían'. Por ello ha pedido a los líderes que al menos permitan flexibilidad para trasladar los fondos de una partida a otra o de un año si es necesario y una cláusula de revisión a medio plazo.
Barroso ha defendido un presupuesto 'ambicioso' que sirva como 'instrumento de inversión' y 'solidaridad', especialmente en las regiones más afectadas por la crisis. También ha reclamado que el nuevo fondo para combatir el paro juvenil que se incluirá en las perspectivas financieras entre en vigor 'lo antes posible'.
No obstante, el presidente de la Comisión ha admitido que cualquier pacto entre los Veintisiete será a la baja respecto a las pretensiones del Ejecutivo comunitario y la Eurocámara y ha acusado a los líderes de preocuparse sólo por los retornos nacionales y no por la dimensión europea.
'Pido a todos los jefes de Estado y de Gobierno que superen sus diferencias y vengan a Bruselas con un espíritu de compromiso y responsabilidad europea para que pueda encontrarse un acuerdo político', ha dicho Barroso en un discurso ante el pleno de la Eurocámara para preparar el Consejo Europeo del 7 y 8 de febrero.
'Un nuevo retraso enviaría un mensaje muy negativo en este tiempo de recuperación económica frágil. El riesgo es que las posiciones se endurezcan y resulten incluso más difíciles de superar', ha resaltado el alto funcionario europeo.
'Como muchos jefes de Estado y de Gobierno se centrarán en sus prioridades nacionales y lo que ven como sus sobres nacionales -mi experiencia es que la mayoría de los Gobiernos hablan más de sus sobres nacionales que de la perspectiva europea- yo lucharé enérgicamente para preservar la dimensión europea del presupuesto', ha asegurado Barroso, que ha puesto como ejemplo los fondos para infraestructuras, investigación, pymes o para el programa Erasmus.
'No cualquier acuerdo es un buen acuerdo', ha avisado el presidente del Ejecutivo comunitario. A su juicio, cualquier compromiso debe preservar además las ayudas para las regiones y las subvenciones para la política agrícola común.
RESPUESTA A LA CRISIS
Además, el presupuesto de la UE debe ser 'una parte indispensable de nuestra respuesta a la crisis económica y social', en especial al paro. 'Hay Estados miembros que no tienen recursos para apoyar a sus trabajadores cuando una empresa decide trasladarse o para ocuparse de los más desfavorecidos', ha indicado Barroso.
'Pido a los jefes de Estado y de Gobierno que no pierdan esta oportunidad de usar el presupuesto europeo para combatir el paro juvenil', ha reclamado, tras recordar que éste afecta a 25 millones de personas en toda Europa. 'Una iniciativa para el empleo juvenil sería un poderoso signo de solidaridad y valor añadido a nivel europeo. Es muy importante que entre en vigor lo antes posible', ha apuntado.
El presidente de la Comisión ha defendido además que se mantengan las ayudas europeas a los países más pobres porque 'suponen la diferencia entre la vida y la muerte'.
En todo caso, Barroso ha acabado reconociendo que 'está claro que cualquier acuerdo entre los jefes de Estado y de Gobierno será desafortunadamente más bajo que lo que la Comisión y este Parlamento desearían'. Por ello ha pedido a los líderes que al menos permitan flexibilidad para trasladar los fondos de una partida a otra o de un año si es necesario y una cláusula de revisión a medio plazo.
