La proporción de trabajadores belgas que desempeñan varios empleos a la vez, una parte de los cuales suelen cobrar en negro, ha crecido un 13 % en los últimos cinco años en paralelo al desempleo, informa hoy el diario económico 'L'Echo'.
En 2012, 190.821 belgas desempeñaban más de un empleo, un 4,2% de los trabajadores del país, frente a la proporción del 3,8% de la mano de obra de hace un lustro.
Las cifras oficiales esconden, no obstante, un fenómeno de mayor amplitud, según esta publicación.
Esta tendencia cada vez más frecuente está estrechamente relacionada con la crisis y con la precariedad del mercado laboral, donde aumentan los contratos temporales, a tiempo parcial y de duración determinada y los salarios permanecen prácticamente congelados.
Entre las razones para desempeñar empleos paralelos a la actividad principal también figuran la pasión por una actividad en particular, la voluntad de completar su tiempo libre o simplemente querer aumentar el poder adquisitivo para poder pagar unas vacaciones, una afición determinada o renovaciones en el hogar.
'L'Echo' asegura que esta práctica no es exclusiva de Bélgica y destaca que países como Alemania bate récords en la materia, y que dentro de la Unión Europea 8,2 millones de personas están en esta situación, sobre todo en países como Grecia, España o Italia.
Las cifras oficiales esconden, no obstante, un fenómeno de mayor amplitud, según esta publicación.
Esta tendencia cada vez más frecuente está estrechamente relacionada con la crisis y con la precariedad del mercado laboral, donde aumentan los contratos temporales, a tiempo parcial y de duración determinada y los salarios permanecen prácticamente congelados.
Entre las razones para desempeñar empleos paralelos a la actividad principal también figuran la pasión por una actividad en particular, la voluntad de completar su tiempo libre o simplemente querer aumentar el poder adquisitivo para poder pagar unas vacaciones, una afición determinada o renovaciones en el hogar.
'L'Echo' asegura que esta práctica no es exclusiva de Bélgica y destaca que países como Alemania bate récords en la materia, y que dentro de la Unión Europea 8,2 millones de personas están en esta situación, sobre todo en países como Grecia, España o Italia.
