'Con todo el interés del mundo'. Así ve el consejero delegado de Gas Natural Fenosa, Rafael Villaseca, el desarrollo de los megavatios eólicos que la compañía obtuvo en el concurso gallego, alrededor del 10% del total. 'Estamos a la espera de los trámites y que se estabilice el marco normativo, que no es fácil porque los cambios son continuos', aseguró.
Villaseca hizo esta afirmación ayer en Madrid, en la presentación de resultados de la compañía, que ganó el año pasado 1.441 millones de euros, un 8,8% más, fundamentalmente por la aportación de su negocio internacional ante el estancamiento de la situación en España. La cifra de negocio alcanzó 24.904 millones de euros, un 18% más.
Las operaciones internacionales de la multinacional crecieron un 22,6% fundamentalmente gracias a Latinoamérica (Colombia, Brasil, México y Argentina) y representan el 43% del negocio.
Villaseca fue crítico con la actividad regulatoria del Gobierno y advirtió que en 2013 los nuevos impuestos se trasladarán al consumidor. Aseguró que, aunque no puede decir cuándo, las medidas fiscales 'acabarán llegando al cliente final, no hay más remedio que trasladarlo'.
También avanzó algo del nuevo plan de la empresa para 2013-2015, que estará marcado por una rebaja de costes, adelantó incluso que habrá ajustes en la plantilla por la situación de España 'aunque no serán medidas traumáticas', subrayó.
También incluirá una contención de la inversión en mercados maduros o de baja rentabilidad, en resumen, que 'la inversión en España no va a crecer', dijo.
Otro de los problemas que se presenta a la compañía este año es Egipto, donde la situación política y social ha provocado el descenso de las entregas de gas desde la planta de Damietta.
El consejero delegado se mostró preocupado por el panorama político en España aunque cree que aún es pronto para saber si lo que está pasando en la política interna tendrá impacto en los mercados en los que la compañía se mueve.
Ante su creciente peso en Latinoamérica, Rafael Villaseca fue preguntado por si la empresa teme una expropiación y lo negó señalando que 'estamos satisfechos con los reguladores y no tenemos ninguna sospecha de que algo así pueda suceder', comentó.
Las operaciones internacionales de la multinacional crecieron un 22,6% fundamentalmente gracias a Latinoamérica (Colombia, Brasil, México y Argentina) y representan el 43% del negocio.
Villaseca fue crítico con la actividad regulatoria del Gobierno y advirtió que en 2013 los nuevos impuestos se trasladarán al consumidor. Aseguró que, aunque no puede decir cuándo, las medidas fiscales 'acabarán llegando al cliente final, no hay más remedio que trasladarlo'.
También avanzó algo del nuevo plan de la empresa para 2013-2015, que estará marcado por una rebaja de costes, adelantó incluso que habrá ajustes en la plantilla por la situación de España 'aunque no serán medidas traumáticas', subrayó.
También incluirá una contención de la inversión en mercados maduros o de baja rentabilidad, en resumen, que 'la inversión en España no va a crecer', dijo.
Otro de los problemas que se presenta a la compañía este año es Egipto, donde la situación política y social ha provocado el descenso de las entregas de gas desde la planta de Damietta.
El consejero delegado se mostró preocupado por el panorama político en España aunque cree que aún es pronto para saber si lo que está pasando en la política interna tendrá impacto en los mercados en los que la compañía se mueve.
Ante su creciente peso en Latinoamérica, Rafael Villaseca fue preguntado por si la empresa teme una expropiación y lo negó señalando que 'estamos satisfechos con los reguladores y no tenemos ninguna sospecha de que algo así pueda suceder', comentó.
