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La carne en Navidad

Fechas señaladas en las que se suelen elaboran platos cárnicos.
photo_camera Fechas señaladas en las que se suelen elaboran platos cárnicos.
Uno de los platos imprescindibles que suelen servirse sobre las mesas de nuestras familias durante las reuniones gastronómicas que celebramos a lo largo de estas fiestas navideñas

Estas fiestas, como cada año, ya estamos pendientes de la planificación de los suculentos y abundantes banquetes familiares. Como ya hemos hablado de los pescados más comunes para estas fiestas, toca hablar de los productos cárnicos.

En España, la carne es la reina de los festines navideños. Por eso, hoy queremos transportarte al pasado para explicarte los orígenes de estas tradiciones gastronómicas y contarte cuáles son las recetas navideñas de carne más típicas.

Vivimos en un país con una importante tradición católica, por lo que casi todas nuestras festividades están relacionadas con esta religión. La Navidad es la fiesta cristiana más significativa: el 25 de diciembre se celebra, como todos sabemos, el nacimiento de Jesús.

Del mismo modo que ocurre durante la Cuaresma, la gastronomía tiene mucho peso en las fiestas navideñas. La Iglesia Católica dictaminó que la vigilia del día de Navidad se tenía que hacer ayuno y abstinencia. La carne estaba prohibida durante todo el día.

Así pues, tradicionalmente, durante el 24 de diciembre solo se podía hacer una única comida (la cena) y debía ser, además, muy ligera. Los feligreses cenaban temprano en familia y luego acudían a la tradicional Misa del Gallo.

Esta misa marcaba el verdadero inicio de la Navidad: a la vuelta, ya de madrugada, se hacía el resopón o, directamente, se volvía a cenar. Esta vez, ya estaba permitido comer carne: se celebraba por todo lo alto el nacimiento de Cristo. Por lo tanto, cuanto más exquisito y abundante fuera el festín, mejor.

Las tradiciones han ido cambiando y ahora, ya comenzamos la Navidad en la misma cena, la cual suele ser un banquete abundante de manjares derivados de un día duro de trabajo por parte de cada hogar.

Como ocurre con el pescado, en estas fechas la demanda de los productos cárnicos típicos de estas festividades, tienden a verse notablemente aumentadas, por lo que le acompaña también, una subida del precio.

El cabrito es un alimento que no solemos incluir en nuestro menú semanal, lo reservamos para ocasiones especiales. Por eso, a pesar de la leve subida que sufre por Navidad, es un plato bastante común en los hogares españoles. Podemos encontrarlo por encima de los 25 euros/kg, sobre los 27, siendo en muchas carnicerías, como el Xurés, un producto gallego de proveedores locales.

El cordero es otro plato de fiesta por excelencia para muchos. Es un plato algo más asequible que el cabrito, debido a que este tiene un sabor ligeramente más suave y un contenido un poco mayor en grasas debido a la dieta que tiene. Podemos encontrarlo por debajo de los 25 euros/kg, rondando entre 22 y 24, contando también que sea producto local.

Otra opción que disponemos para servir a nuestros comensales son los rellenos, que nos permiten la ventaja de ser preparados con antelación y calentarlos justo a la hora de cenar para permitirnos disfrutar más de la compañía de nuestros amigos y familiares, sin tener que pasar gran parte de la noche en la cocina. Los precios de los rellenos varían en gran medida dependiendo del relleno elegido, ya que tenemos gran diversidad donde decantarnos. Disponemos de capones, lomos ibéricos, rollos de ternera… Los precios rondan entre los 17 y los 28 euros/kg dependiendo claro, el tipo de relleno por el que nos decantemos.

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