El secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha pedido hoy que las subvenciones a la contratación se dediquen a que el erario público pague parte de las indemnizaciones por despido, lo que aliviaría el coste de los empresarios y permitiría implantar en España el modelo austríaco de despido.
Méndez ha afirmado que sobre este punto podría llegarse a una 'conclusión positiva' en las negociaciones que CCOO y UGT tienen abiertas con la CEOE, después de que el próximo presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, les haya emplazado a que le presenten acuerdos en materia laboral después del 6 de enero.
Según el líder de UGT, los empresarios han reiterado que no quieren que se les subvencione por contratar, razón por la que plantea que 'los miles de millones' que se dedican a ello se puedan destinar a pagar parte del despido.
El modelo austríaco de despido consiste en que las empresas crean fondos para cada trabajador, que funcionan como un sistema de indemnización.
Cuando el trabajador es despedido puede llevárselo a otra empresa si es contratado de nuevo, emplearlo en cursos de formación o bien destinarlo a su futura pensión.
Para que sea implantado en España debería introducirse una modificación y es que el fondo pueda cobrarse como indemnización, según Méndez.
Otra materia sobre la que Méndez ve posible una 'conclusión positiva' es sobre el modelo de formación dual alemán, que combina las prácticas en las empresas con la formación.
Donde el secretario general de UGT ve más próximo el acuerdo con la patronal es en el impulso de los sistemas de mediación y arbitraje para evitar el recurso a los tribunales en la negociación colectiva.
También cree viable un pacto en la búsqueda de una alternativa a la 'ultraactividad -la prórroga automática de un convenio en el caso de que las partes no lleguen a un acuerdo para su renovación una vez que ha expirado-'.
Méndez opinó que también hay elementos de 'coincidencia' en torno al papel de las mutuas de accidentes de trabajo y sobre la reducción del absentismo laboral.
Preguntado si el acuerdo en todos los temas que ha citado deberían hacer desistir a Rajoy de aplicar una nueva reforma laboral, Méndez ha respondido que no lo sabe.
Del perfil del nuevo ministro de Trabajo, Méndez ha dicho que en tiempos de crisis normalmente tiene una 'gran dependencia' del Ministerio de Economía, por lo que ha matizado que le gustaría que tuviera 'autonomía en el Consejo de Ministros y una voz potente'.
