El ministro de Hacienda niega que la nueva reforma fiscal pretenda 'conectar' con el electorado
El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, aseguró ayer que el Gobierno ha diseñado la rebaja de impuestos para sacar de la crisis a España y no para "conectar con el electorado", aunque sí ha considerado lógico que a medida que la economía mejora este trabajo tenga "cada vez más reconocimiento".
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Montoro respondió así a la pregunta de si cree que la reforma fiscal -cuyo proyecto se aprobará previsiblemente el 18 de julio según señaló el titular de Hacienda- será suficiente para recuperar la "conexión" con sus potenciales votantes.
El ministro recordó que "falta todavía para la siguiente convocatoria" (el año que viene hay elecciones autonómicas, municipales y generales), pero en todo caso "los gobiernos no nos dedicamos a conectar con el electorado, nos dedicamos a hacer lo que tenemos que hacer, con seriedad y rigor, y luego los electorados deciden".
Consulta pública
Sobre los aspectos que están despertando mayor controversia de la propuesta, como gravar las indemnizaciones por despido o reducir determinados incentivos al alquiler o al ahorro, Montoro ha recordado que en la actualidad el trámite abierto es de consulta pública.
"Estamos deseando llevar adelante un diálogo y una negociación en este punto, porque sabemos que es delicado y controvertido", reconoció Montoro sobre la polémica indemnización por despido recogida en la reforma.
Por ello, ha pedido ser "prácticos" y "que en vez de hacer tanta campaña" e "infundir temores", los agentes se sienten a "hablar y dialogar", también sobre otros aspectos de la reforma que están quedando "demasiado ocultos" a la opinión pública. En todo caso, defendió que la propuesta inicial, es "muy equitativa" y prácticamente al 80% de las personas con indemnización por despido en 2013 no les afectaría. Sobre la rebaja del Impuesto de Sociedades del 30% al 25%, dejando fuera a la banca, se justificó diciendo que "es lo mejor, lo menos perturbador y lo menos forzado para todos".
Montoro reiteró que en una reforma tan compleja "siempre tiene que salir alguien perjudicado" y mostró su sorpresa porque "hay gente que parece que estaba a gusto con lo anterior", en referencia al escenario de mayores impuestos que se pretende revertir.
