Los planes de NCG Banco y los de los otros tres bancos nacionalizados (Bankia, Catalunya Caixa y Banco de Valencia) pasarán el primer filtro del Banco de España el día 15 para el día 28 recibir el visto bueno de la Unión Europea. Algunas de las líneas principales que impone la troika para la ayuda europea ya se van conociendo como el compromiso de reducir a la mitad el balance de las cuatro entidades intervenidas por el FROB, publicó ayer 'Expansión'.
Así, las cuatro entidades deberán reducir drásticamente las líneas de negocio consideradas no estratégicas, la venta de participaciones empresariales y el adelgazamiento de la red y, por tanto, de empleados siguiendo la reforma laboral, es decir, con una indemnización de 20 días por año trabajado con un máximo de doce mensualidades. La reducción del balance no será en todos igual, según las fuentes consultadas por 'Expansión', de forma que oscila entre el 40 y el 60% según el tamaño de la entidad y de las ayudas recibidas. A más ayudas, más ajustes. La idea general es que las entidades bancarias surgidas de las antiguas cajas de ahorros vuelvan a sus orígenes centrando su actividad en banca minorista y en sus territorios de origen.
Lo relevante ahora es que la entidad pueda ser solvente por sí misma de forma que pueda ser adquirida por terceros y recuperar la mayor parte de las ayudas.
Por otro lado, las entidades deberán o vender o cerrar actividades y servicios financieros no propios de la actividad minorista, tales como la banca mayorista o la banca privada, trozos de las entidades que parece podrían encontrar comprador más fácilmente.
Lo relevante ahora es que la entidad pueda ser solvente por sí misma de forma que pueda ser adquirida por terceros y recuperar la mayor parte de las ayudas.
Por otro lado, las entidades deberán o vender o cerrar actividades y servicios financieros no propios de la actividad minorista, tales como la banca mayorista o la banca privada, trozos de las entidades que parece podrían encontrar comprador más fácilmente.
