Vigo gana puntos para acoger la planta de baterías para coches eléctricos que Mitsubishi y su socio japonés Yuasa quieren instalar en Europa. La otra candidata, la urbe austriaca de Kittsee en el estado de Burgenland, se ha quedado sin apoyo porque el tercer socio del proyecto (la firma austrocanadiense Magna) se retira de forma temporal debido a 'razones internas de la empresa'.
Así lo recogía ayer la prensa austríaca, como el diario 'Die Presse', que titulaba la noticia de la siguiente manera: 'La fábrica de baterías de Magna se deja de lado' (Magna Batteriewerk vorerst auf Eis gelegt). El periódico hace referencia a un comunicado que Magna emitió el lunes a Wibag, agencia de desarrollo local del Estado, que decía que lo deja 'por ahora', pero que no significa 'el fin definitivo del proyecto' por el que puja Vigo.
El peso del proyecto lo tienen ahora Mitsubishi y Yuasa, con lo que eso significa para Vigo que tiene muchos puntos a favor. Por un lado, la ciudad cuenta con la mayor factoría de coches de España y la segunda de Europa (tras la central de Volkswagen en Alemania). Es la mayor de PSA Peugeot-Citroën, grupo con el que Mitsubishi mantiene relaciones comerciales desde hace años. Ambas multinacionales colaboran en la fabricación de algunos vehículos como el Citroën CZero y el Peugeot Ion. Por otra parte, PSA acaba de adjudicar la fabricación de dos coches eléctricos a la planta de Balaídos, con lo cual la opción de la comarca viguesa para acoger la fábrica de baterías de litio coge más peso.
SIN EL APOYO DE MAGNA
En Austria sonaron otras ubicaciones como Estiria -el segundo estado federal más grande del país y cuya capital es Graz-, que fue defendida hace unas semanas por el fundador de Magna, Frank Stronach, en una entrevista.
No obstante, estas posibles ubicaciones se quedan si su mayor apoyo, Magna, que desde un principio se mostró a favor de que la fábrica de baterías se instalara en Austria para surtir a los fabricantes de coches ubicados en centroeuropa (BMW, o General Motors además de PSA).
El peso del proyecto lo tienen ahora Mitsubishi y Yuasa, con lo que eso significa para Vigo que tiene muchos puntos a favor. Por un lado, la ciudad cuenta con la mayor factoría de coches de España y la segunda de Europa (tras la central de Volkswagen en Alemania). Es la mayor de PSA Peugeot-Citroën, grupo con el que Mitsubishi mantiene relaciones comerciales desde hace años. Ambas multinacionales colaboran en la fabricación de algunos vehículos como el Citroën CZero y el Peugeot Ion. Por otra parte, PSA acaba de adjudicar la fabricación de dos coches eléctricos a la planta de Balaídos, con lo cual la opción de la comarca viguesa para acoger la fábrica de baterías de litio coge más peso.
SIN EL APOYO DE MAGNA
En Austria sonaron otras ubicaciones como Estiria -el segundo estado federal más grande del país y cuya capital es Graz-, que fue defendida hace unas semanas por el fundador de Magna, Frank Stronach, en una entrevista.
No obstante, estas posibles ubicaciones se quedan si su mayor apoyo, Magna, que desde un principio se mostró a favor de que la fábrica de baterías se instalara en Austria para surtir a los fabricantes de coches ubicados en centroeuropa (BMW, o General Motors además de PSA).
