La federación de Madrid de UGT planteó a sus trabajadores un despido colectivo (ERE) que afecta a 40 de sus 70 empleados del centro de Avenida de América y que, según el sindicato, se debe a una reducción drástica o incluso la eliminación de programas de la Comunidad de Madrid.
El secretario de Administración de UGT Madrid, Carmelo Ruiz de la Hermosa, declaró que el ERE, presentado ante la administración el pasado día 13, no precisa ningún tipo de indemnización para no 'condicionar' la negociación con los trabajadores, algo que negaron los portavoces de la plantilla, que señalan que la empresa planeta indemizaciones de 20 días con tope de 12 meses, como marca la reforma laboral.
Ruiz de la Hermosa dijo que 'no es cierto' que UGT haya planteado un pago de 20 días con un tope de 12 meses a los afectados, e insistió en que el expediente presentado el día 13 no precisa ninguna cantidad. Además, recordó que el expediente que UGT presentó el 16 de mayo de 2012 fijó un pago de 35 días por año trabajado con un máximo de 15 mensualidades, cantidad que se elevó a 40 días y 18 mensualidades en el caso de los trabajadores que se acogieron a la recolocación.
Ruiz de la Hermosa precisó que el actual ERE 'empieza por un problema absolutamente económico', que es la falta de programas, y que el sindicato ha 'aguantado' los puestos de los trabajadores 'hasta que ha podido'. A continuación, explicó que la reorganización en el sindicato aprobada en varias resoluciones congresuales motivó que servicios que antes facilitaban las federaciones regionales -jurídicos, visitas a empresas- pasasen a ser potestad de las federaciones estatales.
PAGOS 'BLOQUEADOS'
UGT aseguraba ayer que es 'consciente' del 'perjuicio' que esta decisión va a suponer para los trabajadores que puedan resultar afectados y para la propia organización. Además, añade que UGT realizó programas cuyo coste anticipó y cuyo abono efectivo permanece 'bloqueado', una circunstancia que imposibilita la 'viabilidad y mantenimiento' de los mismos de cara al futuro.
La organización apuntó que considera necesaria una 'reorganización y racionalización' de los servicios que presta a trabajadores y afiliados, lo que obliga a llevar a cabo esta reestructuración. 'Todo ello, sin renunciar a garantizar y preservar el mantenimiento y sostenibilidad territorial del sindicato y los servicios que se prestan a los trabajadores, a los afiliados y a los delegados, ajustando los gastos a los ingresos de las cuotas de los afiliados', finaliza el sindicato.
En relación a este tema, según fuentes de la plantilla del sindicato, la dirección ha achacado la necesidad de plantear este ERE a la menor afiliación y la consiguiente bajada en los ingresos por cuotas, así como a la falta de ayudas públicas por parte de la Administración.
En estos momentos sólo se han producido dos reuniones entre los representantes de los trabajadores y los de la dirección del sindicato madrileño, la primera para constituir la mesa y la segunda para la entrega formal de la propuesta del ERE, que afecta al 67% de la plantilla en Madrid.
Ruiz de la Hermosa dijo que 'no es cierto' que UGT haya planteado un pago de 20 días con un tope de 12 meses a los afectados, e insistió en que el expediente presentado el día 13 no precisa ninguna cantidad. Además, recordó que el expediente que UGT presentó el 16 de mayo de 2012 fijó un pago de 35 días por año trabajado con un máximo de 15 mensualidades, cantidad que se elevó a 40 días y 18 mensualidades en el caso de los trabajadores que se acogieron a la recolocación.
Ruiz de la Hermosa precisó que el actual ERE 'empieza por un problema absolutamente económico', que es la falta de programas, y que el sindicato ha 'aguantado' los puestos de los trabajadores 'hasta que ha podido'. A continuación, explicó que la reorganización en el sindicato aprobada en varias resoluciones congresuales motivó que servicios que antes facilitaban las federaciones regionales -jurídicos, visitas a empresas- pasasen a ser potestad de las federaciones estatales.
PAGOS 'BLOQUEADOS'
UGT aseguraba ayer que es 'consciente' del 'perjuicio' que esta decisión va a suponer para los trabajadores que puedan resultar afectados y para la propia organización. Además, añade que UGT realizó programas cuyo coste anticipó y cuyo abono efectivo permanece 'bloqueado', una circunstancia que imposibilita la 'viabilidad y mantenimiento' de los mismos de cara al futuro.
La organización apuntó que considera necesaria una 'reorganización y racionalización' de los servicios que presta a trabajadores y afiliados, lo que obliga a llevar a cabo esta reestructuración. 'Todo ello, sin renunciar a garantizar y preservar el mantenimiento y sostenibilidad territorial del sindicato y los servicios que se prestan a los trabajadores, a los afiliados y a los delegados, ajustando los gastos a los ingresos de las cuotas de los afiliados', finaliza el sindicato.
En relación a este tema, según fuentes de la plantilla del sindicato, la dirección ha achacado la necesidad de plantear este ERE a la menor afiliación y la consiguiente bajada en los ingresos por cuotas, así como a la falta de ayudas públicas por parte de la Administración.
En estos momentos sólo se han producido dos reuniones entre los representantes de los trabajadores y los de la dirección del sindicato madrileño, la primera para constituir la mesa y la segunda para la entrega formal de la propuesta del ERE, que afecta al 67% de la plantilla en Madrid.
