La joven, tiroteada por su expareja, se encuentra en situación de muerte cerebral. El agresor se suicidó tras disparar contra ella
La mujer española de 28 años que ayer resultó muy grave al recibir un disparo en la cabeza por parte de su expareja sentimental cuando recogía a su hijo de un colegio de Elda (Alicante) se encuentra hospitalizada en estado de coma.
Fuentes de la investigación han informado a EFE de que la víctima se halla en situación de muerte cerebral y está conectada a una máquina que la mantiene con vida, aunque han añadido que parece muy difícil su recuperación.
El presunto autor del disparo, un español de 31 años, falleció ayer poco después de protagonizar la agresión machista cuando se metió en el coche de la víctima y se estrelló violentamente contra un muro del colegio eldense en su huida.
El suceso ocurrió en torno a las 17.10 horas cuando la madre recogía a su hijo en el colegio Santo Negro, situado en la avenida Condes, donde se presentó su expareja y le efectuó, al menos, un disparo en la cabeza.
El hombre tenía una orden de alejamiento de 300 metros y de comunicación, pese a lo cual los pasados días 4 y 5 de noviembre la vulneró al ponerse en contacto telefónico con la mujer, que denunció los hechos.
El hombre no tenía licencia de arma de fuego ni se tiene constancia de que tuviera ninguna en propiedad, según las fuentes consultadas.
El suceso ha conmocionado a la ciudad de Elda, cuyo alcalde, Rubén Alfaro, ha convocado a las 10.00 horas una junta de portavoces urgente, así como una concentración silenciosa a las 20 horas.
