La Comisión para el Impulso del Proceso de Paz, creada para gestionar las recomendaciones del foro social organizado por Lokarri y Bake Bidea, ha expresado hoy su disposición a dialogar con ETA y con todos los 'actores' implicados, incluidas las asociaciones de víctimas de la violencia en Euskadi.
Este grupo ha respondido, en un comunicado, al mensaje hecho público por ETA el pasado sábado, cuando aseguró que estaba dispuesta a mantener contactos con la comisión, que ha precisado que está abierta a reunirse con la organización terrorista 'para avanzar en el camino propuesto por las recomendaciones del Foro Social para Impulsar el Proceso de Paz'.
Dicho foro es una iniciativa de Bake Bidea y Lokarri, que el pasado mes de mayo presentó un documento de 'recomendaciones útiles para superar los obstáculos que actualmente presenta el camino de la paz y de la convivencia' en Euskadi.
Esta iniciativa contó con la participación de 700 personas, la aportación de doce expertos internacionales y más de quinientas propuestas concretas, de las que se extractaron dichas recomendaciones 'en relación al desarme y desmantelamiento de las estructuras militares de ETA, la reintegración social de los presos y huidos, la garantía de los Derechos Humanos y los principios para afrontar todo lo sucedido en el pasado'.
La comisión ha informado además de que mantuvo un encuentro el pasado 27 de diciembre con los integrantes del llamado grupo de interlocución de los presos de ETA, quienes se comprometieron a 'mantener un diálogo constructivo para profundizar en las recomendaciones especialmente encaminadas a la reintegración de las personas presas'.
Este compromiso 'se mantiene' aún a pesar de que 'algunas de las personas con las que se mantuvo este encuentro fueron detenidas en la operación que tuvo lugar el pasado 8 de enero', ha añadido este grupo.
Las recomendaciones del Foro Social en materia de presos abogan por la 'reintegración' en la sociedad de los reclusos de ETA, pero por medio de 'cauces legales', aceptando que, aunque sea un 'proceso integral', 'se debe desarrollar de forma individualizada, escalonada y en tiempo prudencial'.
Dicho proceso requeriría que los reclusos 'muestren su compromiso con el nuevo escenario de paz y renuncien a las vías violentas, además de reconocer el daño causado como consecuencia de su actuación', según recoge el texto de sugerencias del Foro.
La comisión ha explicado también que en una reunión interna celebrada el 30 de enero decidió 'abrir cauces de diálogo con los principales actores en el proceso de paz', por lo que solicitarán reunirse con 'los gobiernos implicados, los principales partidos políticos y con las asociaciones de víctimas'.
'Con este trabajo la comisión quiere contrastar el contenido de las recomendaciones y ofrecer su apoyo y colaboración para impulsar nuevos pasos que ayuden a que el proceso de paz avance y se consolide', han añadido.
La comisión está formada por la juez del TSJPV Garbiñe Biurrun, el magistrado honorario del Tribunal de Apelación de Pau (Francia) Henri Duhalt, el decano del Colegio de Abogados de Bizkaia, Nazario Oleaga, el abogado Michel Tubiana, el activista en favor de los derechos humanos Fernando Armendáriz y los periodistas Jordi Armadans, Anne Marie Bordes y Maite Pérez Larumbe.
