El belga Daniel Pierre Imandt ha sido condenado hoy por la Audiencia de Girona a 32,5 años de cárcel por asesinar y descuartizar a su expareja el 25 de septiembre de 2010 en la vivienda en la que residían en el municipio de Sant Pere Pescador (Girona).
Según indica la sentencia, Imandt es autor de un delito de asesinato con ensañamiento con los agravantes de parentesco y abuso de superioridad.
El fallo considera que el belga es también culpable de un delito de profanación de cadáver, otro de lesiones psíquicas, otro de coacciones y uno de amenazas.
La pena aplica con el máximo rigor el veredicto del tribunal popular, que le consideró culpable de todos estos cargos.
Además, Daniel Pierre Imandt deberá pagar una indemnización de 71.000 euros a cada uno de los padres de la víctima, Sabrina Tverbouss-Twerdy, de 45.000 al hermano y de 20.000 al jardinero al que intentó convencer para que le ayudase a deshacerse del cadáver y que fue quien denunció los hechos a los Mossos d'Esquadra.
La sentencia considera probado que Imandt apuñaló y golpeó a su expareja en su domicilio de Sant Pere Pescador hasta acabar con su vida para descuartizarla posteriormente sin que la ingesta previa de bebidas alcohólicas y psicofármacos le hubiese afectado la inteligencia y la voluntad.
El condenado, que permanece en prisión desde el 30 de septiembre de 2010, podrá interponer recurso de apelación contra la pena impuesta.
El fallo considera que el belga es también culpable de un delito de profanación de cadáver, otro de lesiones psíquicas, otro de coacciones y uno de amenazas.
La pena aplica con el máximo rigor el veredicto del tribunal popular, que le consideró culpable de todos estos cargos.
Además, Daniel Pierre Imandt deberá pagar una indemnización de 71.000 euros a cada uno de los padres de la víctima, Sabrina Tverbouss-Twerdy, de 45.000 al hermano y de 20.000 al jardinero al que intentó convencer para que le ayudase a deshacerse del cadáver y que fue quien denunció los hechos a los Mossos d'Esquadra.
La sentencia considera probado que Imandt apuñaló y golpeó a su expareja en su domicilio de Sant Pere Pescador hasta acabar con su vida para descuartizarla posteriormente sin que la ingesta previa de bebidas alcohólicas y psicofármacos le hubiese afectado la inteligencia y la voluntad.
El condenado, que permanece en prisión desde el 30 de septiembre de 2010, podrá interponer recurso de apelación contra la pena impuesta.
