El subsecretario del Ministerio del Interior, Luis Aguilera, ha señalado hoy que, según las primeras estimaciones, los daños causados por el temporal que debe atender la Administración General del Estado en el País Vasco ascienden a 17 millones de euros, de los cuales 15 corresponden a Gipuzkoa.
Aguilera ha visitado hoy en San Sebastián los destrozos ocasionados por el oleaje el pasado fin de semana junto a una comitiva en la que han participado el director general de Protección Civil y Emergencias, Juan Díaz Cruz, el delegado del Gobierno en el País Vasco, Carlos Urquijo, y el subdelegado en Gipuzkoa, José Luis Herrador.
Respecto a las obras de reparación del espigón de la Zurriola, gravemente afectado por el oleaje, Aguilera ha constatado que el 'daño es patente' y ha asegurado que la Administración del Estado está trabajando en ello.
Sin embargo, ha eludido ofrecer una fecha sobre el inicio y el coste de las obras hasta que el Ministerio de Medio Ambiente, al que está adscrita la demarcación de Costas, lleve a cabo una valoración que abogue por una solución 'provisional o definitiva'.
El País Vasco y sobre todo Gipuzkoa es la zona donde la sucesión de tormentas, borrascas y temporales durante todo el mes y la concatenación de alertas rojas por fenómenos atmosféricos que se registraron los pasados 1 y 2 de febrero ha ocasionado 'daños mayores', ha señalado Aguilera.
El asunto será tratado hoy en el Consejo de Ministros, que analizará un primer informe de los daños del temporal, ha explicado.
Aguilera ha indicado que el departamento de la Administración General del Estado al que corresponde reparar las afecciones causadas por el oleaje es fundamentalmente la demarcación de Costas, que 'desde el primer momento' ha estado pendiente del temporal.
Sobre el conjunto de la cornisa cantábrica, ha indicado que la Administración del Estado está recopilando los datos que facilitan las comunidades afectadas para elaborar una estimación global de los daños causados.
Ha explicado que el Ministerio del Interior por el momento ha recibido la petición de declaración de zona catastrófica por parte del Ayuntamiento de Santander.
