Unión, Progreso y Democracia (UPyD), el partido liderado por Rosa Díez, aspira a conseguir grupo parlamentario propio en el Congreso de los Diputados tras las próximas elecciones generales del día 9 de marzo con el propósito de que 'el sentido común pase de la calle al Parlamento'. Su objetivo es ser el partido 'del sentido común' que llegue al Parlamento 'para desideologizar la defensa de lo obvio'.
Durante su intervención en el Foro de la Nueva Economía, Díez calificó como 'un milagro' la constitución de UPyD y su presencia en todas las comunidades y basó su creación en la 'demanda real' que existe en una parte de la sociedad. Así, presentó el nuevo partido como una formación 'transversal' en la que participan personas de toda condición, 'la mayoría sin experiencia política previa'.
Respecto al futuro de la formación, se mostró 'convencida' de que España se encuentra ante 'un cambio de ciclo' y se producirá 'un vuelco' en las próximas elecciones que les permitirá formar grupo parlamentario propio. Según aseguró, las encuestas realizadas por los grandes partidos reflejan un porcentaje 'muy alto' de abstención 'que tiene como primera opción UPyD'.
En este sentido, rechazó el 'bipartidismo imperfecto' en el que, a su juicio, se ha convertido la política española y lamentó que los partidos nacionalistas sean 'los árbitros'. 'Nadie está a salvo de que llegue al poder un gobierno sin límites --continuó--. Todos los gobiernos han alcanzado acuerdos con los nacionalistas, pero todo era razonable hasta que llegó este presidente'.
Por ello, entre sus propuestas electorales, destacó la necesidad de elevar hasta 400 el número de diputados 'para ganar en proporcionalidad' y reivindicó así mismo que las comunidades autónomas se conviertan en circunscripciones electorales a cambio del actual sistema por el que las circunscripciones son las provincias. Además, reclamó la elecciones directa de cargos unipersonales y la limitación por ley de la duración de los mandatos.
CERRAR EL MODELO AUTONÓMICO
Durante su discurso reivindicó que España es 'una nación' como 'un instrumento para garantizar la igualdad de todos los españoles', por lo que subrayó la necesidad de revisar la distribución competencial y alcanzar un pacto de Estado 'para cerrar el modelo autonómico igualando los techos competenciales', además de establecer una mayoría cualificada de dos tercios para la aprobación de los estatutos autonómicos y revisar la financiación de las comunidades.
Otra de sus reivindicaciones es la reforma de la educación porque, según lamentó, España se encuentra 'a la cola de Europa en calidad y control institucional de los contenidos'. 'No se trata de quitar competencias a las comunidades sino de establecer un sistema educativo con los mismos ratios de calidad en todo el territorio', explicó la ex dirigente socialista.
A su juicio, el Estado debe recuperar las competencias de educación para formar 'un sistema unitario' en el que las comunidades tengan capacidades de gestión 'siempre que se respete un currículum básico'. Así, reclamó también un pacto de Estado sobre este tema para garantizar la estabilidad del sistema educativo 'al menos por 20 años'.
Respecto a la justicia, reclamó que el número de magistrados que forman el Tribunal Constitucional pase de 12 a 15. Los tres nuevos magistrados serían designados por el Consejo General del Poder Judicial, que también tendría la labor del proponer al Parlamento una terna de nombres para el puesto de Fiscal General del Estado, un cargo que, según exigió, debería ser elegido por una mayoría de tres quintos.
ACTITUD ACOMPLEJADA DEL PSOE
Rosa Díez calificó además la campaña electoral como 'curiosa' porque el PP es 'quien propone y el PSOE responde', algo que calificó como 'una actitud algo acomplejada'. Además, criticó las escasas opciones que tiene un nuevo partido y reclamó un nuevo modelo de financiación de partidos para que todos puedan concurrir con igualdad a los comicios.
UPyD se presenta como un partido 'laico' que dará 'el mismo trato' a todas las confesiones que respeten los derechos humanos y sean compatibles con el orden constitucional. 'Ellos se organizan por su cuenta y nosotros y todos nos respetamos', explicó Díez antes de aclarar que 'laico no quiere decir antirreligioso'. 'Y según las recomendaciones de voto de los obispos no se puede votar a nadie, ni Rajoy se salva', bromeó.
Por último, se refirió a la controversia creada en torno al canon digital y señaló que su partido apoya la eliminación de este gravamen y la instauración de medidas que compensen a los creadores. A su juicio, el canon digital se trata de 'una ley medieval y un despropósito', por lo que reclamó la necesidad de 'proteger al creador sin trastornos' y sin 'tratar como delincuentes preventivos a todos los demás'.
Respecto al futuro de la formación, se mostró 'convencida' de que España se encuentra ante 'un cambio de ciclo' y se producirá 'un vuelco' en las próximas elecciones que les permitirá formar grupo parlamentario propio. Según aseguró, las encuestas realizadas por los grandes partidos reflejan un porcentaje 'muy alto' de abstención 'que tiene como primera opción UPyD'.
En este sentido, rechazó el 'bipartidismo imperfecto' en el que, a su juicio, se ha convertido la política española y lamentó que los partidos nacionalistas sean 'los árbitros'. 'Nadie está a salvo de que llegue al poder un gobierno sin límites --continuó--. Todos los gobiernos han alcanzado acuerdos con los nacionalistas, pero todo era razonable hasta que llegó este presidente'.
Por ello, entre sus propuestas electorales, destacó la necesidad de elevar hasta 400 el número de diputados 'para ganar en proporcionalidad' y reivindicó así mismo que las comunidades autónomas se conviertan en circunscripciones electorales a cambio del actual sistema por el que las circunscripciones son las provincias. Además, reclamó la elecciones directa de cargos unipersonales y la limitación por ley de la duración de los mandatos.
CERRAR EL MODELO AUTONÓMICO
Durante su discurso reivindicó que España es 'una nación' como 'un instrumento para garantizar la igualdad de todos los españoles', por lo que subrayó la necesidad de revisar la distribución competencial y alcanzar un pacto de Estado 'para cerrar el modelo autonómico igualando los techos competenciales', además de establecer una mayoría cualificada de dos tercios para la aprobación de los estatutos autonómicos y revisar la financiación de las comunidades.
Otra de sus reivindicaciones es la reforma de la educación porque, según lamentó, España se encuentra 'a la cola de Europa en calidad y control institucional de los contenidos'. 'No se trata de quitar competencias a las comunidades sino de establecer un sistema educativo con los mismos ratios de calidad en todo el territorio', explicó la ex dirigente socialista.
A su juicio, el Estado debe recuperar las competencias de educación para formar 'un sistema unitario' en el que las comunidades tengan capacidades de gestión 'siempre que se respete un currículum básico'. Así, reclamó también un pacto de Estado sobre este tema para garantizar la estabilidad del sistema educativo 'al menos por 20 años'.
Respecto a la justicia, reclamó que el número de magistrados que forman el Tribunal Constitucional pase de 12 a 15. Los tres nuevos magistrados serían designados por el Consejo General del Poder Judicial, que también tendría la labor del proponer al Parlamento una terna de nombres para el puesto de Fiscal General del Estado, un cargo que, según exigió, debería ser elegido por una mayoría de tres quintos.
ACTITUD ACOMPLEJADA DEL PSOE
Rosa Díez calificó además la campaña electoral como 'curiosa' porque el PP es 'quien propone y el PSOE responde', algo que calificó como 'una actitud algo acomplejada'. Además, criticó las escasas opciones que tiene un nuevo partido y reclamó un nuevo modelo de financiación de partidos para que todos puedan concurrir con igualdad a los comicios.
UPyD se presenta como un partido 'laico' que dará 'el mismo trato' a todas las confesiones que respeten los derechos humanos y sean compatibles con el orden constitucional. 'Ellos se organizan por su cuenta y nosotros y todos nos respetamos', explicó Díez antes de aclarar que 'laico no quiere decir antirreligioso'. 'Y según las recomendaciones de voto de los obispos no se puede votar a nadie, ni Rajoy se salva', bromeó.
Por último, se refirió a la controversia creada en torno al canon digital y señaló que su partido apoya la eliminación de este gravamen y la instauración de medidas que compensen a los creadores. A su juicio, el canon digital se trata de 'una ley medieval y un despropósito', por lo que reclamó la necesidad de 'proteger al creador sin trastornos' y sin 'tratar como delincuentes preventivos a todos los demás'.
