El vicepresidente segundo de la Junta General del Principado, Pelayo Roces, fue el primer dirigente del PP en anunciar su salida de este partido, tras la baja de Francisco Álvarez-Cascos, aunque la dirección nacional de los populares espera que sus aspiraciones en Asturias sigan intactas.
Roces presentó su renuncia, un día después de que el ex vicepresidente del Gobierno, Francisco Álvarez-Cascos, anunciara que estaría dispuesto a liderar un nuevo partido tras su frustrada designación como candidato del PP en Asturias, que le llevó a darse de baja como militante de esta formación.
Pelayo Roces formalizó su renuncia al acta de diputado regional como paso previo a la baja como militante en el PP y remitió una carta Mariano Rajoy, en la que le acusa de gobernar el partido de forma 'desacertada' y con falta de valores. 'Tengo una sensación rara, pero creo que este ya no es mi partido', respondió Roces, al ser preguntado si le da pena abandonar esta formación política, después de ser militante del PP desde 1981, concejal en Siero en el periodo 1991-1995 y diputado autonómico. También ayer hizo efectiva ayer su baja en el PP el ex senador popular Isidro Martínez Oblanca, quien comenzó su carrera política como concejal en Gijón en 1983 de la mano de Cascos.
De forma paralela, el presidente regional del PP asturiano, Ovidio Sánchez, consideró 'respetadas pero insignificantes' las bajas registradas en el partido, tras la renuncia de Cascos.La dirección del PP de Asturias difundió ayer que tras la decisión de Francisco Álvarez-Cascos de abandonar esta formación, 39 afiliados pidieron la baja en el partido, ninguno parlamentario nacional, alcalde, concejal o presidente de junta local, con la única excepción del diputado autonómico Pelayo Roces. El PP asturiano tiene 24.000 afiliados, según esta formación política.
El vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, dio por hecho la creación en Asturias de un nuevo partido regionalista liderado por Cascos.
Pelayo Roces formalizó su renuncia al acta de diputado regional como paso previo a la baja como militante en el PP y remitió una carta Mariano Rajoy, en la que le acusa de gobernar el partido de forma 'desacertada' y con falta de valores. 'Tengo una sensación rara, pero creo que este ya no es mi partido', respondió Roces, al ser preguntado si le da pena abandonar esta formación política, después de ser militante del PP desde 1981, concejal en Siero en el periodo 1991-1995 y diputado autonómico. También ayer hizo efectiva ayer su baja en el PP el ex senador popular Isidro Martínez Oblanca, quien comenzó su carrera política como concejal en Gijón en 1983 de la mano de Cascos.
De forma paralela, el presidente regional del PP asturiano, Ovidio Sánchez, consideró 'respetadas pero insignificantes' las bajas registradas en el partido, tras la renuncia de Cascos.La dirección del PP de Asturias difundió ayer que tras la decisión de Francisco Álvarez-Cascos de abandonar esta formación, 39 afiliados pidieron la baja en el partido, ninguno parlamentario nacional, alcalde, concejal o presidente de junta local, con la única excepción del diputado autonómico Pelayo Roces. El PP asturiano tiene 24.000 afiliados, según esta formación política.
El vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, dio por hecho la creación en Asturias de un nuevo partido regionalista liderado por Cascos.
