Dos españolas fallecieron en un accidente marítimo en Mozambique. Se trata de Carmen Serrano y Teresa Ramos, de 85 y 67 años respectivamente y naturales de Murcia, informaron fuentes diplomáticas. Ambas perdieron la vida el domingo cuando un golpe de mar las sorprendió mientras navegaban desde la isla de Goa a la de Mozambique, dentro de un grupo que organizó una salida de fin de semana con niñas huérfanas.
Serrano, monja de la Orden Franciscana de la Purísima, residía desde hace años en Nampula, la tercera ciudad del país, y donde dirigía un orfanato. La segunda víctima llegó esa misma semana a Nampula junto a otros tres compañeros murcianos para trabajar como voluntarios en el orfanato durante el mes de julio, explicaron las mismas fuentes. Al menos dos de los voluntarios murcianos se apuntaron a la excursión que el orfanato organizó para visitar las islas de Mozambique y de Goa, separadas por apenas dos kilómetros y donde no son habituales este tipo de incidentes.
El grupo, compuesto por una quincena de personas, contrató una barca para pasar el domingo en la isla de Goa. Aunque a la ida el mar estaba en calma, durante el regreso el tiempo se complicó y a la embarcación le sorprendió un golpe de mar. El accidente se saldó con ocho muertos, las dos españolas y seis adolescentes, una de las cuales aún no apareció.
La Embajada de España en Mozambique inició las gestiones para ayudar en lo posible en la repatriación de los cuerpos, que no se espera para antes del siguiente fin de semana por la disponibilidad de vuelos. Además, la congregación de las Franciscanas de la Purísima mostró su pesar por el fallecimiento de la monja y de la voluntaria.
El grupo, compuesto por una quincena de personas, contrató una barca para pasar el domingo en la isla de Goa. Aunque a la ida el mar estaba en calma, durante el regreso el tiempo se complicó y a la embarcación le sorprendió un golpe de mar. El accidente se saldó con ocho muertos, las dos españolas y seis adolescentes, una de las cuales aún no apareció.
La Embajada de España en Mozambique inició las gestiones para ayudar en lo posible en la repatriación de los cuerpos, que no se espera para antes del siguiente fin de semana por la disponibilidad de vuelos. Además, la congregación de las Franciscanas de la Purísima mostró su pesar por el fallecimiento de la monja y de la voluntaria.
