Alrededor de 2.000 personas tuvieron que ser desalojadas a causa de los incendios que se originaron desde la noche del domingo en torno a pueblos como Chulilla y Gestalgar, en Valencia. El fuego de Culilla ya se encuentra estabilizado, aunque quedan aún algunos puntos 'calientes'. En total, afectó entorno a 5.500 hectáreas.
El consejero de Gobernación de la comunidad valenciana, Serafín Castellano, comunicó a primera hora de ayer que cerca de 2.000 personas tuvieron que ser desalojadas a causa de los incendios durante la noche del domingo en diversos pueblos como Chulilla y Gestalgar (Valencia), o en urbanizaciones cercanas. Castellano explicó que se estaba intentando 'proteger los cascos urbanos'.
El Centro de Coordinación de Emergencias (CCE), en su cuenta de Twitter, precisó que los desalojos también se produjeron en Sot de Chera y Pedralba (Valencia), con cien vecinos que tuvieron que ser evacuados. A causa de la evacuación, 296 niños que viven en la zona no pudieron asistir ayer a clases. La mayoría de los alumnos que no pudieron acudir a sus centros escolares pertenecen al CEIP de Pedralba, aunque también hresultaron afectados los aularios de Chulilla, Sot de Chera, Bugarra y Gestalgar.
Castellano volvió a comparecer a última hora de la tarde de ayer, cuando comunicó que el fuego declarado en la localidad de Chulilla pudo ser estabilizado, si bien aún presenta 'algunos puntos calientes'.
EL VIENTO EN CONTRA
El consejero explicó que los efectivos que participaron en las tareas de extinción están 'acotando el perímetro'. Avanzó que las condiciones climatológicas 'siguen siendo negativas', de cara a una total estabilización de los incendios, ya que ayer seguió soplando viento de Poniente. 'Puede ser que a partir de ahora baje un 10% pero sigue con rachas importantes', añadió.
El diputado autonómico señaló que en las tareas de extinción están interviniendo 800 efectivos terrestres y 42 medios aéreos, aunque durante la tarde de ayer se tuvieron que desviar efectivos a Riba-roja, con motivo de otro incendio declarado sobre las dos de la tarde que continúa activo. El consejero no explicó las hipótesis que se barajan sobre las causas del incendio de Chulilla ya que, según dijo, los agentes de la Guardia Civil y de la unidad técnica de investigación están trabajando todo el día y no hay, de momento, ninguna conclusión.
En este caso, por tanto, apuntó que no se puede descartar 'nada'. No obstante, sobre el incendio de Riba-roja explicó que 'la hipótesis principal' que se baraja es que fue 'intencionado'.
Antes de la rueda de prensa, Castellano se reunió con los alcaldes de los municipios afectados y con algunos técnicos para evaluar el estado de las carreteras. Según dijo, 'algunas vías se van a abrir y otras a limpiar porque hay rastros de piedras y escombros'. Agregó que éstas se irán abriendo progresivamente. Por su parte, el vicepresidente primero de la Diputación de Valencia, Juan José Medina, visitó ayer el puesto de Mando Avanzado que se encontraba en Chulilla y explicó que con esta visita pretendía 'ponernos al servicio de la Generalitat, y en este caso del conseller de Gobernación, Serafín Castellano, para trabajar mano a mano con nuestras brigadas y con los efectivos del Consorcio pero fundamentalmente para tener una primera toma de contacto con los alcaldes afectados y ver la realidad del incendio'.
El Centro de Coordinación de Emergencias (CCE), en su cuenta de Twitter, precisó que los desalojos también se produjeron en Sot de Chera y Pedralba (Valencia), con cien vecinos que tuvieron que ser evacuados. A causa de la evacuación, 296 niños que viven en la zona no pudieron asistir ayer a clases. La mayoría de los alumnos que no pudieron acudir a sus centros escolares pertenecen al CEIP de Pedralba, aunque también hresultaron afectados los aularios de Chulilla, Sot de Chera, Bugarra y Gestalgar.
Castellano volvió a comparecer a última hora de la tarde de ayer, cuando comunicó que el fuego declarado en la localidad de Chulilla pudo ser estabilizado, si bien aún presenta 'algunos puntos calientes'.
EL VIENTO EN CONTRA
El consejero explicó que los efectivos que participaron en las tareas de extinción están 'acotando el perímetro'. Avanzó que las condiciones climatológicas 'siguen siendo negativas', de cara a una total estabilización de los incendios, ya que ayer seguió soplando viento de Poniente. 'Puede ser que a partir de ahora baje un 10% pero sigue con rachas importantes', añadió.
El diputado autonómico señaló que en las tareas de extinción están interviniendo 800 efectivos terrestres y 42 medios aéreos, aunque durante la tarde de ayer se tuvieron que desviar efectivos a Riba-roja, con motivo de otro incendio declarado sobre las dos de la tarde que continúa activo. El consejero no explicó las hipótesis que se barajan sobre las causas del incendio de Chulilla ya que, según dijo, los agentes de la Guardia Civil y de la unidad técnica de investigación están trabajando todo el día y no hay, de momento, ninguna conclusión.
En este caso, por tanto, apuntó que no se puede descartar 'nada'. No obstante, sobre el incendio de Riba-roja explicó que 'la hipótesis principal' que se baraja es que fue 'intencionado'.
Antes de la rueda de prensa, Castellano se reunió con los alcaldes de los municipios afectados y con algunos técnicos para evaluar el estado de las carreteras. Según dijo, 'algunas vías se van a abrir y otras a limpiar porque hay rastros de piedras y escombros'. Agregó que éstas se irán abriendo progresivamente. Por su parte, el vicepresidente primero de la Diputación de Valencia, Juan José Medina, visitó ayer el puesto de Mando Avanzado que se encontraba en Chulilla y explicó que con esta visita pretendía 'ponernos al servicio de la Generalitat, y en este caso del conseller de Gobernación, Serafín Castellano, para trabajar mano a mano con nuestras brigadas y con los efectivos del Consorcio pero fundamentalmente para tener una primera toma de contacto con los alcaldes afectados y ver la realidad del incendio'.
