La Ertzaintza investiga las circunstancias de la muerte de un adolescente de 13 años cuyo cadáver fue hallado ayer en su domicilio de San Sebastián con heridas de arma blanca en el abdomen. Una persona del entorno de la familia de la víctima encontró el cadáver a las 12:45 horas en el interior del domicilio familiar ubicado en el cuarto piso del número 5 de la calle Logroño, en el donostiarra barrio del Antiguo.
El cuerpo del adolescente estaba en uno de los dormitorios de la vivienda, en la que la Ertzaintza halló un cuchillo y manchas de sangre, que también han aparecido en el tirador de la puerta principal de acceso al piso y en el garaje. Estos indicios hacen que no se deseche la posibilidad de que alguna persona haya estado en el lugar antes de que el cuerpo del menor fuera hallado.
No obstante, la inspección detallada del lugar en el que ha aparecido el cuerpo ha llevado tanto a los forenses como a los especialistas de la Ertzaintza a no descartar la hipótesis del suicidio como causa del fallecimiento del menor.
En un primer momento la Ertzaintza estudió la hipótesis de que se tratara de un homicidio, por lo que agentes de este cuerpo policial acudieron a un colegio de San Sebastián en el que están escolarizados los tres hermanos pequeños de la víctima. La Ertzaintza se hizo cargo de los niños para garantizar su seguridad, al tiempo que localizó a la madre y están intentando localizar encontrar al padre del menor, cuyo paradero aún se desconoce.
Según fuentes de la investigación y comentaron algunos vecinos, los padres del chaval fallecido se encuentran en proceso de separación. La familia de la víctima lleva algunos meses viviendo en este domicilio y actualmente el padre regenta un asador ubicado en la cercana avenida de Zumalakarregi.
No obstante, la inspección detallada del lugar en el que ha aparecido el cuerpo ha llevado tanto a los forenses como a los especialistas de la Ertzaintza a no descartar la hipótesis del suicidio como causa del fallecimiento del menor.
En un primer momento la Ertzaintza estudió la hipótesis de que se tratara de un homicidio, por lo que agentes de este cuerpo policial acudieron a un colegio de San Sebastián en el que están escolarizados los tres hermanos pequeños de la víctima. La Ertzaintza se hizo cargo de los niños para garantizar su seguridad, al tiempo que localizó a la madre y están intentando localizar encontrar al padre del menor, cuyo paradero aún se desconoce.
Según fuentes de la investigación y comentaron algunos vecinos, los padres del chaval fallecido se encuentran en proceso de separación. La familia de la víctima lleva algunos meses viviendo en este domicilio y actualmente el padre regenta un asador ubicado en la cercana avenida de Zumalakarregi.
