El pasado día 26, cuando navegaba a la altura de la costa de Lugo, sufrió una fuerte escora y los 22 tripulantes del barco fueron evacuados a tierra por Salvamento Marítimo.
El carguero panameño "Modern Express" se encuentra ya a refugio en el puerto de Bilbao después de ocho días de odisea por el Cantábrico, los seis primeros a la deriva y los otros dos remolcado lentamente desde la costa francesa hasta la dársena vizcaína.
La operación de entrada en el puerto estaba prevista para la mañana pero se ha tenido que prolongar hasta última hora de la tarde debido a las olas y el viento, que han dificultado la maniobra.
El "Modern Express", construido en 2001, es un carguero de unos 160 metros de eslora con una capacidad de carga de casi 11.000 toneladas y viajaba de Gabón al puerto normando de Le Havre con 3.600 toneladas de madera y una decena de máquinas de obra pública en sus bodegas.
El carguero panameño también almacena en sus tanques unas 300 toneladas de fuelóleo y 180 de gasóleo para su propulsión.
El pasado día 26, cuando navegaba a la altura de la costa de Lugo, sufrió una fuerte escora, presumiblemente por el deslizamiento de la carga dentro de la bodega, y los 22 tripulantes del barco fueron evacuados a tierra por Salvamento Marítimo.
El barco, sin tripulación, siguió a la deriva por el Cantábrico hasta acabar frente a la costa francesa de Las Landas, donde el pasado lunes -seis días después de ser evacuado- técnicos de la empresa holandesa de rescates marinos Smit Salvage se descolgaron sobre el barco y consiguieron amarrarlo al remolcador de rescate "Centaurus".
La mala mar, con olas de hasta cuatro metros y fuerte viento, dificultaron esta operación y el remolque del carguero hasta el puerto de Bilbao, designado por las autoridades españolas, que impusieron una fianza a la mutualidad de armadores de 21,6 millones, como puerto de refugio en esta operación por su seguridad y condiciones.
Tras un lento remolque, por el estado del mar, el viento contrario y el riesgo de vuelco del barco, el "Modern Express" llegó en la tarde de ayer a la altura de la costa vizcaína, pero las autoridades decidieron posponer la entrada en puerto para hacerla con luz diurna.
Sin embargo, la fuerte marejada y vientos del noroeste de fuerza 4 o 5 que se han registrado durante la mañana han hecho que la operación de entrada se haya prolongado durante toda la jornada, siempre con el carguero visible desde tierra.
En esta operación, en la que han participado siete remolcadores, el helicóptero de Salvamento Marítimo Helimer 204 ha descolgado al barco a ocho técnicos de Smit Salvage para habilitar una línea de remolque adicional por popa para mejorar la seguridad.
Finalmente ha sido acercado por los grandes remolcadores de rescate y después, para el tránsito dentro de aguas del puerto de Bilbao, ya se han hecho cargo de la operación seis remolcadores más pequeños, que operan habitualmente en la dársena vizcaína y tienen un perfecto conocimiento de la misma.
El "Modern Express" ha quedado fondeado en una dársena abrigada de la ampliación del puerto exterior.
Ahora, los técnicos de Smit Salvage determinarán cómo adrizar la nave, aunque en la zona donde ha quedado atracado solo se realizarán las primeras tareas de inspección, cálculos y primeros trabajos para enderezar el buque, según una nota del ministerio de Fomento.
De todas formas, la operación de enderezamiento del barco, que se prolongará durante días, no afectará a la actividad del puerto ni a las empresas concesionarias.
La recolocación de la carga podría estar controlada policialmente, ya que el Gobierno de Gabón ha pedido a la Interpol que investigue la madera que transporta este barco porque este país prohíbe la exportación de madera sin procesar, aunque el presidente del operador náutico responsable de la carga, Geert Van Gansbeke, ha asegurado que sólo cargó en el barco madera cortada.
