La Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) acordó por unanimidad pedir al Gobierno que aplace a diez años el pago al Estado por parte de los ayuntamientos de los 5.891 millones de euros que deben devolver al haberles salido negativas las liquidaciones de las entregas a cuenta de 2008 y 2009.
En la comunicación aprobada por la décima asamblea de la FEMP, que se celebró ayer en Madrid, se resalta la necesidad de ampliar de cinco años (los que se habían aprobado) a diez el plazo para amortizar la devolución del dinero que el Gobierno les adelantó por esos dos ejercicios. Si esta propuesta no sale adelante, la FEMP demanda al nuevo Ejecutivo que salga de las elecciones generales del 20 de noviembre que incluya en los Presupuestos Generales del Estado para 2012 una partida, dentro del fondo municipal, para compensar a los ayuntamientos de la pérdida de recursos por esas devoluciones.
El nuevo presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), Juan Ignacio Zoido, exigió en su primer discurso al frente de la institución que se apruebe este aplazamiento de la devolución de la deuda municipal al Estado, un nuevo modelo de financiación y que los ayuntamientos participen también en los ingresos de las Comunidades, no sólo en los del Estado.
CHAVES CONTRA BARBERÁ
La resolución se produce después de que la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, hiciera un llamamiento a sus homólogos para que no devolvieran las liquidaciones negativas, que en el caso de su Ayuntamiento ascienden a 126 millones de euros. Para el vicepresidente territorial del Gobierno, Manuel Chaves, la actitud de Barberá supone un llamamiento a la insumisión, por lo que advirtió a la alcaldesa de Valencia de que puede incurrir en un acto ilegal e inconstitucional.
Los socialistas no se pronunciaron al respecto en el transcurso de la asamblea, pero dieron su apoyo a la comunicación que ya había adelantado el coordinador de Política Local del PP, Juan Manuel Moreno. El PP cree que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero hizo 'una malísima previsión presupuestaria' en los ejercicios de 2008 y 2009 para 'tapar el déficit y evitar pronunciar la palabra crisis', dijo Moreno. Por ello, se diseñaron unos Presupuestos Generales del Estado 'absolutamente erróneos', que 'no acertaron y marcaron objetivos que todo el mundo económico reconoció claramente inexactos'. Unas cuentas que, según Moreno, obligaron a comunidades autónomas y ayuntamientos a tener que realizar devoluciones millonarias en tiempos de crisis económica.
El vicepresidente primero de la Federación de Municipios y Provincias (FEMP), el alcalde de Vigo Abel Caballero, planteó que los ayuntamientos dispongan de dos años de carencia en los que no tengan que realizar ningún pago, y que se sumarían a los diez de aplazamiento para devolver las entregas a cuenta de 2008 y 2009.
El alcalde de la ciudad olívica insistió en no tener ninguna duda de que el Gobierno que salga elegido en las urnas el próximo 20 de noviembre estará obligado a cambiar la estructura general de las administraciones y atender a los ayuntamientos con más financiación y aplazando los pagos.
El nuevo presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), Juan Ignacio Zoido, exigió en su primer discurso al frente de la institución que se apruebe este aplazamiento de la devolución de la deuda municipal al Estado, un nuevo modelo de financiación y que los ayuntamientos participen también en los ingresos de las Comunidades, no sólo en los del Estado.
CHAVES CONTRA BARBERÁ
La resolución se produce después de que la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, hiciera un llamamiento a sus homólogos para que no devolvieran las liquidaciones negativas, que en el caso de su Ayuntamiento ascienden a 126 millones de euros. Para el vicepresidente territorial del Gobierno, Manuel Chaves, la actitud de Barberá supone un llamamiento a la insumisión, por lo que advirtió a la alcaldesa de Valencia de que puede incurrir en un acto ilegal e inconstitucional.
Los socialistas no se pronunciaron al respecto en el transcurso de la asamblea, pero dieron su apoyo a la comunicación que ya había adelantado el coordinador de Política Local del PP, Juan Manuel Moreno. El PP cree que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero hizo 'una malísima previsión presupuestaria' en los ejercicios de 2008 y 2009 para 'tapar el déficit y evitar pronunciar la palabra crisis', dijo Moreno. Por ello, se diseñaron unos Presupuestos Generales del Estado 'absolutamente erróneos', que 'no acertaron y marcaron objetivos que todo el mundo económico reconoció claramente inexactos'. Unas cuentas que, según Moreno, obligaron a comunidades autónomas y ayuntamientos a tener que realizar devoluciones millonarias en tiempos de crisis económica.
El vicepresidente primero de la Federación de Municipios y Provincias (FEMP), el alcalde de Vigo Abel Caballero, planteó que los ayuntamientos dispongan de dos años de carencia en los que no tengan que realizar ningún pago, y que se sumarían a los diez de aplazamiento para devolver las entregas a cuenta de 2008 y 2009.
El alcalde de la ciudad olívica insistió en no tener ninguna duda de que el Gobierno que salga elegido en las urnas el próximo 20 de noviembre estará obligado a cambiar la estructura general de las administraciones y atender a los ayuntamientos con más financiación y aplazando los pagos.
