Las Fuerzas de Seguridad siguen contabilizando los alijos de sustancias estupefacientes que estaban almacenadas en el depósito de Sanidad Exterior del Puerto de Málaga, donde el pasado sábado se produjo un robo, aunque temen que hayan podido desaparecer 'cientos de kilos' de droga.
Así lo han asegurado a Efe fuentes de la investigación, que han destacado la 'complejidad' del trabajo para comprobar y volver a pesar toda la droga almacenada, que procede de decenas de operaciones contra el narcotráfico realizadas por la Policía y la Guardia Civil en la Costa del Sol y otros puntos del litoral andaluz.
Las mismas fuentes han explicado que también se está investigando una furgoneta de grandes dimensiones que ha aparecido calcinada en las últimas horas y que, según los primeros indicios, podría haber sido utilizada por los ladrones para transportar la droga sustraída del depósito judicial.
No es extraño que las bandas del crimen organizado quemen los vehículos utilizados en sus asaltos, a fin de borrar cualquier huella o prueba y dificultar el trabajo de la Policía Científica en la identificación de los autores.
Fuentes cercanas al caso atribuyen el robo a un grupo de delincuencia organizada, ya que los asaltantes inutilizaron el sistema de cámaras de vigilancia del perímetro y la alarma no llegó a activarse, lo que demuestra que 'sabían lo que hacían'.
Los ladrones utilizaron además una lanza térmica, una herramienta capaz de abrir un agujero en la cámara acorazada en la que se guardaba la droga.
Por otro lado, la Fiscalía Antidroga de Málaga va a intervenir en las diligencias abiertas por el caso, que llevará un juzgado de instrucción de la capital malagueña.
