El secretario nacional de Sanidad y Asuntos Sociales del PP y consejero del ramo en Castilla-La Mancha, José Ignacio Echániz, afirmó ayer que la reforma acordada este miércoles en el Consejo Interterritorial del Sanidad, encaminada a implantar el copago de medicamentos supone para los pensionistas 'cuatro cafés al mes'. 'Al pensionista que más le va a costar las medicinas al cabo del mes va a ser ocho euros, que son cuatro cafés, un café a la semana, 0,20 céntimos al día. Desde el punto de vista recaudatorio es una medida muy menor', explicó Echániz.
El secretario nacional de Sanidad, entiende que es un mecanismo necesario en 'unos momentos tremendamente difíciles' para el sistema sanitario público, que 'evita la introducción del copago en los servicios sanitarios'. 'La gestión de los servicios sanitarios tienen graves problemas económicos para llegar a final de mes y con problemas para seguir prestando con normalidad los servicios sanitarios, no solo el farmacéutico', añadió.
Por otra parte, Echániz cree que la puesta en marcha de los nuevos baremos va a ser 'muy ágil y rápida'. 'Hoy la va a aprobar el Consejo de Ministros y entrará en vigor en cuanto se publique en el BOE. Las comunidades autonómas, con la llamada receta electrónica, la van a poder poner en marcha en muy poco tiempo', explicó. Además, manifestó que 'no tiene un afán recaudatorio sino disuasorio porque cada año se tiran a la basura 3.700 toneladas de medicamentos sin abrir'; y, en este ámbito, adelantó que el Gobierno obligará a los laboratorios a fabricar cajas con menos dosis, adecuadas a los tratamientos prescritos.
La respuesta del PSOE a estas declaraciones no se hizo esperar y fue la vicesecretaria general del partido, Elena Valenciano quien consideró 'cruel' y 'muy poco inteligente' que el secretario nacional de Sanidad dijera que el copago de los medicamentos para los pensionistas 'son cuatro cafés'. Valenciano señaló que, para un enfermo, la medicina no se parece en nada a un café e hizo hincapié en que los pensionistas van a tener que pagarse las medicinas en un momento en el que muchos están sosteniendo con sus pensiones a sus familias.
Su compañera de partido, la exministra de Sanidad y diputada nacional por Alicante, Leire Pajín, también acusó al Gobierno central de 'meter la tijera en el bolsillo de los ciudadanos' antes que recortar 'el beneficio farmacéutico'. 'Hay recorrido para tener una sanidad sostenible sin necesidad de que ningún ciudadano pague y, lo que es peor, mintieron, porque negaron una y otra que vez que aplicarían ningún tipo de repago y es lo que están haciendo', subrayó Pajín a los medios.
Por otro lado, el portavoz de Sanidad de IU en el Congreso de los Diputados, Gaspar Llamazares, calificó de 'monumento a la hipocresía' las explicaciones que está dando la titular de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, para justificar el copago farmacéutico. Además, criticó que el impuesto lo tengan que pagar los 'débiles', aludiendo a los enfermos, los crónicos y los ancianos. 'El Gobierno cumplió todos sus compromisos electorales', indicó Llamazares.
Finalmente, el portavoz de Facua-Consumidores en Acción, Rubén Sánchez, acusó al secretario nacional de Sanidad, José Ignacio Echániz, de 'burlarse' de los pensionistas al asegurar que el copago farmacéutico les supondrá 'cuatro cafés al mes', y criticó que 'se pase de 'pedir un sacrificio' a los pensionistas a 'burlarse' del bajo precio que les supondrá los medicamentos, sobre todo cuando 'hay multitud de pensionistas en España que no tienen ni para comer en la calle ni para tomar un café como podrá hacer Echániz cada vez que quiera', apostilló.
Por otra parte, Echániz cree que la puesta en marcha de los nuevos baremos va a ser 'muy ágil y rápida'. 'Hoy la va a aprobar el Consejo de Ministros y entrará en vigor en cuanto se publique en el BOE. Las comunidades autonómas, con la llamada receta electrónica, la van a poder poner en marcha en muy poco tiempo', explicó. Además, manifestó que 'no tiene un afán recaudatorio sino disuasorio porque cada año se tiran a la basura 3.700 toneladas de medicamentos sin abrir'; y, en este ámbito, adelantó que el Gobierno obligará a los laboratorios a fabricar cajas con menos dosis, adecuadas a los tratamientos prescritos.
La respuesta del PSOE a estas declaraciones no se hizo esperar y fue la vicesecretaria general del partido, Elena Valenciano quien consideró 'cruel' y 'muy poco inteligente' que el secretario nacional de Sanidad dijera que el copago de los medicamentos para los pensionistas 'son cuatro cafés'. Valenciano señaló que, para un enfermo, la medicina no se parece en nada a un café e hizo hincapié en que los pensionistas van a tener que pagarse las medicinas en un momento en el que muchos están sosteniendo con sus pensiones a sus familias.
Su compañera de partido, la exministra de Sanidad y diputada nacional por Alicante, Leire Pajín, también acusó al Gobierno central de 'meter la tijera en el bolsillo de los ciudadanos' antes que recortar 'el beneficio farmacéutico'. 'Hay recorrido para tener una sanidad sostenible sin necesidad de que ningún ciudadano pague y, lo que es peor, mintieron, porque negaron una y otra que vez que aplicarían ningún tipo de repago y es lo que están haciendo', subrayó Pajín a los medios.
Por otro lado, el portavoz de Sanidad de IU en el Congreso de los Diputados, Gaspar Llamazares, calificó de 'monumento a la hipocresía' las explicaciones que está dando la titular de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, para justificar el copago farmacéutico. Además, criticó que el impuesto lo tengan que pagar los 'débiles', aludiendo a los enfermos, los crónicos y los ancianos. 'El Gobierno cumplió todos sus compromisos electorales', indicó Llamazares.
Finalmente, el portavoz de Facua-Consumidores en Acción, Rubén Sánchez, acusó al secretario nacional de Sanidad, José Ignacio Echániz, de 'burlarse' de los pensionistas al asegurar que el copago farmacéutico les supondrá 'cuatro cafés al mes', y criticó que 'se pase de 'pedir un sacrificio' a los pensionistas a 'burlarse' del bajo precio que les supondrá los medicamentos, sobre todo cuando 'hay multitud de pensionistas en España que no tienen ni para comer en la calle ni para tomar un café como podrá hacer Echániz cada vez que quiera', apostilló.
