Su colección está integrada por 1.400 piezas precolombinas, que el fiscal valoró en 53,5 millones

Absuelto de contrabando de arte el costarricense Patterson

Leonard Patterson, en el banquillo de los acusados. (Foto: LAVANDEIRA JR)
El ciudadano costarricense Leonard Patterson, acusado de la exportación ilegal de cerca de 1.400 piezas de arte precolombino y juzgado a principios de este mes en Santiago, fue finalmente absuelto, según señaló el abogado encargado de su defensa, Ramón Sabín. El Ministerio Fiscal pedía para Patterson dos años de prisión y una multa de 60 millones de euros por la presunta exportación ilegal de cerca de 1.400 piezas de arte precolombino, una colección que el fiscal tasó en 53,5 millones de euros.
En los fundamentos jurídicos la sentencia basa la absolución de Patterson del delito de contrabando al entender la juez que no hay pruebas para demostrar que las piezas pertenezcan 'al Patrimonio Histórico Español'. En este tema centró sus argumentos la defensa de Patterson durante la vista oral, que había pedido la absolución de su patrocinado al entender además que no existía ni una sola prueba que demostrase que su cliente había tenido una actitud dolosa y tampoco que cometiese un delito de contrabando.

Los hechos que se declararon probados no se consideran constitutivos de un delito de contrabando, indica la sentencia, al matizar que la Ley de Represión del Contrabando castiga a quienes 'saquen del territorio español bienes que integren el Patrimonio Histórico sin la autorización de la Administración del Estado, cuando esta sea necesaria', siempre y cuando el valor de los bienes exceda los 18.000 euros. Durante el proceso, tanto el acusado como su abogado trataron de demostrar que la Xunta de Galicia se encargó de la llegada de la colección a España y que nadie advirtió a Patterson de la necesidad de solicitar un permiso al Ministerio de Cultura para el retorno de las piezas a Alemania, país de residencia del acusado.

En la sentencia se indica además que 'si bien podría haber existido una ocultación de la mercancía a la acción de la Administración aduanera, difícilmente puede hablarse de una importación legal a España de bienes muebles que posean los valores' de la Ley del Patrimonio Histórico español. Se refiere el juez, no obstante, a la existencia de indicios 'de un tráfico ilícito de bienes culturales de procedencia hispanoamericana que obliga (en virtud de tratados internacionales) a la restitución de los bienes a sus respectivos países de origen de los que hubieran salido ilegalmente, sin perjuicio de la prueba sobre la propiedad que pueda corresponder a particulares o instituciones distintas de los Estados'.


PERIPLO POR COMPOSTELA

Las piezas de arte precolombino a las que se alude en la sentencia recalaron en un primer momento en una exposición en el Auditorio de Galicia en Santiago y posteriormente se organizó una nueva muestra en la iglesia de San Domingos de Bonaval y en el palacio de Fonseca. A su conclusión, la colección se depositó en los almacenes de la empresa de mudanzas Boquete de Santiago, donde permanecieron en una cámara de seguridad durante una década hasta marzo de 2008.

Fue en esa fecha cuando Patterson, según el fiscal, cometió un presunto delito de contrabando de arte al ordenar que la colección se trasladase a Munich, su ciudad de residencia, pero las autoridades alemanas la intervinieron e inmovilizaron la petición de España y de varios países latinoamericanos que reclamaron la propiedad de algunas piezas. Contra la sentencia que absuelve a Patterson de contrabando cabe recurso de apelación.

Te puede interesar