La Fiscalía y la defensa de la acusada imponen la pena de un año de prisión con la eximente incompleta de alteración psíquica y el agravante de parentesco
La Fiscalía y la defensa de la acusada por el homicidio imprudente de su propio bebé han llegado a un acuerdo de conformidad por el que corresponde imponer a esta mujer, S.C.G, la pena de un año de prisión con la eximente incompleta de alteración psíquica y el agravante de parentesco.
El Tribunal Superior de Justicia de Galicia ha divulgado este acuerdo bajo el cual la representación legal de la procesada ha pedido la suspensión de la ejecución de la pena privativa de libertad, manifestando el Ministerio Público su conformidad.
El juicio se inició este lunes en la sección sexta de la Audiencia Provincial de A Coruña, que tiene su sede en Santiago, con la petición inicial de trece años de prisión por parte del fiscal.
La acusada, mayor de edad y sin antecedentes penales, soltera y con domicilio en Ribeira, donde reside con su padre, impedido físico, y un hermano suyo, minusválido psíquico, dio a luz en la madrugada del 28 de diciembre de 2012, sobre las tres de la madrugada, a un varón.
El parto se produjo en su habitación, sobre la alfombra.
Sin tocar al crío, cortó el cordón umbilical, pero no lo ató; se fue a duchar y a dormir, y mantuvo así la situación hasta las ocho de la mañana. Tras levantarse, esta mujer, con una minusvalía del 67% y diagnosticada de retraso mental ligero, sujetó al bebé por un pie y lo tiró a la papelera de su habitación, cayendo éste de cabeza.
Después, hizo un nudo a la bolsa, y lo dejó allí una hora más, hasta que lo arrojó al contenedor de basura más cercano a su domicilio.
El cadáver fue hallado a las once de la mañana del día siguiente en la planta de reciclaje de basura de Cerceda (A Coruña).
La mujer tenía profundamente afectadas sus capacidades volitivas y cognitivas en el momento de los hechos.
El bebé presentaba hemorragias, hematomas y congestiones varias.
