La vicepresidenta de la Asociación Stop Accidentes, Jeanne Piccard, reclamó hoy durante un acto en Pontevedra, ante la proximidad de las elecciones generales, a los diferentes candidatos que están elaborando sus respectivos programas que incluyan la seguridad vial como una prioridad política.
Así, Piccard se refirió a las últimas estadísticas, según las cuales cada año mueren en accidentes de tráfico en las carreteras españolas unas 4.000 personas. Es un coste que no se puede asumir y ante el que de ninguna manera nos podemos resignar, subrayó.
Tras reiterar que no se puede admitir la sangría de las carreteras ni social ni humanamente, la vicepresidenta de Stop Accidentes apeló a la necesidad de que combatir la siniestralidad en las carreteras se convierta en una realidad política del futuro Gobierno.
No obstante, Piccard matizó que para obtener resultados es necesario consenso, puesto que son varios los frentes desde los que se debe actuar no solo a través del Código Penal, sino también en el ámbito educativo, la sanidad e incluso el ciudadano debe hacer un esfuerzo porque seguridad vial es seguridad ciudadana, indicó.
Respecto a la velocidad, y tras pronunciarse totalmente en contra de la mínima posibilidad de que se permita correr más en autopista, Jeanne Piccard recordó que precisamente la velocidad está implicada en la gran mayoría de los accidentes mortales o con heridos grave.
No somos conscientes del riesgo, lo que significa la velocidad y que a 120 kilómetros por hora cualquier distracción puede ser mortal, ya que ante cualquier obstáculo necesitamos un campo de futbol para frenar, manifestó.
ACCIDENTE DE VIGO.
Piccard recordó el suceso registrado recientemente en la ciudad olívica, donde dos jóvenes al volante de sendos coches provocaron un accidente que provocó la muerte de un matrimonio, y aseguró que se podía haber evitado con la adopción de una serie de medidas.
De este modo, lamentó que en Vigo ni siquiera se están restando puntos del carné, y que hasta ahora nadie iba a la cárcel por un problema de tráfico y después de matar seguían conduciendo al día siguiente.
Tras la última reforma del Código Penal, que calificó de necesaria, Piccard se mostró más optimista aunque puntualizó que aún resta por ver cómo actúan ahora los jueces.
Tras reiterar que no se puede admitir la sangría de las carreteras ni social ni humanamente, la vicepresidenta de Stop Accidentes apeló a la necesidad de que combatir la siniestralidad en las carreteras se convierta en una realidad política del futuro Gobierno.
No obstante, Piccard matizó que para obtener resultados es necesario consenso, puesto que son varios los frentes desde los que se debe actuar no solo a través del Código Penal, sino también en el ámbito educativo, la sanidad e incluso el ciudadano debe hacer un esfuerzo porque seguridad vial es seguridad ciudadana, indicó.
Respecto a la velocidad, y tras pronunciarse totalmente en contra de la mínima posibilidad de que se permita correr más en autopista, Jeanne Piccard recordó que precisamente la velocidad está implicada en la gran mayoría de los accidentes mortales o con heridos grave.
No somos conscientes del riesgo, lo que significa la velocidad y que a 120 kilómetros por hora cualquier distracción puede ser mortal, ya que ante cualquier obstáculo necesitamos un campo de futbol para frenar, manifestó.
ACCIDENTE DE VIGO.
Piccard recordó el suceso registrado recientemente en la ciudad olívica, donde dos jóvenes al volante de sendos coches provocaron un accidente que provocó la muerte de un matrimonio, y aseguró que se podía haber evitado con la adopción de una serie de medidas.
De este modo, lamentó que en Vigo ni siquiera se están restando puntos del carné, y que hasta ahora nadie iba a la cárcel por un problema de tráfico y después de matar seguían conduciendo al día siguiente.
Tras la última reforma del Código Penal, que calificó de necesaria, Piccard se mostró más optimista aunque puntualizó que aún resta por ver cómo actúan ahora los jueces.
