Su presencia para localizar al pescador fue aprovechada para intentar localizar a otro hombre desaparecido hace varios meses
El dispositivo de búsqueda para tratar de hallar el cuerpo del pescador desaparecido la pasada semana en A Guarda tras ser arrastrado por el mar se dio ayer, martes, por concluido temporalmente tras seis días de búsqueda sin éxito.
La presencia de buzos especializados de la Guardia Civil fue aprovechada en su última jornada para intentar localizar a otro hombre desaparecido hace varios meses y cuyo vehículo había sido localizado en marzo sumergido en aguas de la dársena del puerto guardés.
Durante la mañana de ayer se desplegó por la costa entre A Guarda y O Rosal un operativo formado por los buzos del Grupo de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil, apoyados por la embarcación 'Corvo Mariño', la embarcación 'Salvamar Mirach' de Salvamento Marítimo, así como por voluntarios de Protección Civil. La búsqueda se centró en las inmediaciones de Punta Bazar, donde Enrique G.A., vecino de Tui, desapareció el pasado jueves arrastrado por el mar cuando se encontraba en unas rocas pescando en compañía de su sobrino, Diego García, de 22 años —cuyo cadáver fue recuperado el pasado domingo—, y de una tercera persona, que fue el que dio la voz de alarma.
Tras dar por concluida la búsqueda, los buzos se trasladaron al puerto de A Guarda, donde 'peinaron' la dársena para tratar de encontrar alguna pista sobre un hombre cuyo vehículo fue encontrado el 1 de marzo en esas aguas. El desaparecido es un vecino de A Guarda, aunque afincado con su mujer en O Rosal, de 62 años de edad. Su coche llevaba al menos tres semanas sumergido y había sido sometido a importantes golpes de mar, lo que habría provocado que careciera de matrículas al remolcarlo. En su interior no se halló ningún cuerpo, por lo que se sospecha que pudo haber salido despedido del vehículo por la acción del oleaje y las corrientes.
