El 'camarada Arenas' llama a Silva Sande 'impostor y violador' y añade que 'olía mal'

Piden 17 años para ambos y otra terrorista por atacar en 1998 una empresa de trabajo temporal de la avenida de América de Madrid
El secretario general del Partido Comunista de España Reconstituido -PCE (r)-, Manuel Pérez Martínez, alias 'camarada Arenas', ha acusado al miembro arrepentido de los GRAPO Fernando Silva Sande de ser 'un impostor y un violador' y ha señalado que, a causa de sus 'fechorías', nunca se han 'llevado bien'.

'Nos veíamos alguna vez, tomábamos una caña por compromiso, pero yo no quería saber nada de él. Además es que olía mal', ha espetado el acusado provocando las carcajadas del público que seguía el juicio en la sala de vistas de la Audiencia Nacional.

Los dos se han sentado este jueves en el banquillo de los acusados junto a María Victoria Gómez Méndez por un atentado cometido el 29 de enero de 1998 contra la empresa de trabajo temporal (ETT) People de la avenida de América de Madrid. El fiscal Daniel Campos pide 17 años de cárcel para cada uno de ellos por un delito de estragos terroristas.

La gresca entre los terroristas se ha iniciado cuando Silva Sande ha dicho que el Comando Central de los GRAPO, que él dirigía, coordinaba todas las operaciones de la organización, pero que era la Comisión Política, encabezada por el 'camarada Arenas', la que decidía 'qué se hacía, cómo y cuándo'. 'Él era el responsable máximo, la palabra final siempre le correspondía a él en una organización piramidal como la nuestra', ha asegurado.

Silva Sande, que tiene la condición de testigo protegido en otras causas como la que investiga el secuestro y desaparición del empresario Publio Cordón, ha añadido que el PCE (r) 'proporcionaba gente' a los GRAPO y que el partido funcionaba a modo de 'cantera' de la organización terrorista. Tras apuntar que no tiene 'ninguna enemistad personal' con él, ha reiterado que el 'camarada Arenas' era 'la cabeza de ambas organizaciones'.


UN MANUAL DE EXPLOSIVOS

Pérez Martínez, sin embargo, ha dicho que su labor se limitaba a ejercer 'la dirección política e ideológica del movimiento de resistencia popular', en el que se incluían 'organizaciones políticas, sociales, culturales y sindicales', entre ellas los GRAPO. Además, era el responsable del archivo del movimiento, lo que explicaría, según ha defendido, que tuviera en su poder un manual de explosivos de la organización terrorista.

Sobre Silva Sande, el 'camarada Arenas' ha indicado que 'no coincidía en nada' con él, que jamás mantuvieron 'relación política ni ideológica' y que éste no tenía 'la suficiente talla personal, política ni moral para que se le admitiese en el Comité Central del partido'.

Aún así, ha defendido los atentados contra las empresas de trabajo temporal y ha dicho que, aunque no participó en ellos ni los diseñó, se trataba de 'acciones justas' para combatir 'un hecho sangrante, el trabajo esclavo de los jóvenes obreros'. '¡Aplaudíamos las acciones, claro que sí, ya está bien, había que hacer algo para contener esa hemorragia. Lo aplaudíamos y lo apoyábamos!', ha dicho.


'LOS DEMÁS ÉRAMOS UNOS NEGADOS'

María Victoria Gómez también ha cargado contra Silva Sande, al que ha acusado de querer ir ahora 'de honrado por la vida'. 'Es mentira todo lo que acaba de decir, el máximo dirigente de los GRAPO, el que llevaba desde 1965, y el que tenía la última palabra era él. Los demás éramos poco menos que unos negados', ha asegurado.

El atentado se produjo en los servicios del restaurante Tamara, colindante con la empresa temporal. Estaba confeccionado con un kilo de explosivo que hizo explosión a las 5.15 horas, causando un cráter de 35 centímetros de diámetro y daños por valor de 191.772,82 euros, según la estimación recogida en el escrito de acusación de la Fiscalía.

El fiscal también solicita que los acusados indemnicen a la ETT con 105.752,66 euros, al restaurante afectado con 85.261,83 euros y a las comunidades de propietarios de la avenida de América que resultaron dañados por la explosión.

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