Catorce marineros gallegos, en su mayoría naturales de las localidades pontevedresas de Baiona y Cangas, han partido del aeropuerto vigués de Peinador rumbo a las islas Seychelles para relevar a la tripulación del 'Alakrana', que navega rumbo a Puerto Victoria tras ser liberados por el grupo de piratas que los mantuvo secuestrados durante 47 días.
Momentos antes de su salida hacia París -única escala del viajea las 12.35 horas, el próximo capitán del buque, el baionés Agustín Freire, señaló que la presencia de seguridad privada a bordo es algo nuevo para todos, por lo que tendrán que hablar con ellos, ver cuales son sus propuestas y adecuar su funcionamiento al del barco, esperando que no molesten mucho en las labores diarias de los marineros.
A este respecto, el cangués Manuel Nantes, que ejerce de engrasador en el 'Alakrana', confesó que le preocupa tanta vigilancia y que todavía desconocía si podría adaptarse bien a esta circunstancia. A ver como nos adaptamos, hasta que estemos allí no sé si lo llevaré bien o mal, aseguró.
Nantes apuntó que a lo mejor la peligrosidad también aumenta al tener personal armado a bordo y opinó que este tipo de iniciativas resuelven de manera temporal el problema de la piratería pero mantuvo que el Gobierno debería de encontrar soluciones permanentes.
ESTADO DE ANIMO
A pesar de todo, Freire coincidió con el resto de su tripulación al señalar que parte hacia el Indico un poco más tranquilos al disponer de seguridad privada y que su familia comparte esa confianza añadida que aporta la vigilancia con la que contarán por primera vez.
El capitán desveló que los tripulantes del 'Alakrana' están bien y dijo que confían en poder encontrarse con ellos en Puerto Victoria, donde esperan un encuentro mucho más emotivo de lo habitual.
Igualmente, relató que han vivido el secuestro con mucha angustia y con el factor añadido de que el relevo se produce poco después del secuestro. Nos hemos librado por dos semanas, perfectamente podíamos ser nosotros los que estuviéramos allí, recordó.
Asimismo, informó que hay mucha suciedad en el barco y que antes de echarse a la mar tendrán que reponer material de trabajo, víveres y las herramientas informáticas que se llevaron los piratas tras la liberación.
Por último, tanto Freire como Nantes aseguraron que desconocían si los corsarios llegaron a bajar o no a algún marinero a tierra. Este último apuntó a la posibilidad de que fuera una estrategia de los piratas para acelerar el proceso y opinó que si fue así, salió bien.
DECLARACIONES DEL PATRÓN SOBRE EL RESCATE
Además, el patrón del atunero vasco 'Alakrana', Ricardo Blach, detalló en declaraciones que, tras el rescate de la tripulación, uno de los dos helicópteros que acudió a la zona salió detrás de los piratas sobrevolando su posición, aunque, según explicó, no se escucharon disparos. Yo de disparos no he visto nada, ni he oído nada. Me parece que no, aseguró.
Te confirmo que uno de los helicópteros voló sobre los piratas porque tampoco estaban tan lejos, estaban entre tierra y nosotros.
Puedo confirmar que uno de los helicópteros voló por encima de los piratas, eso seguro, pero yo no sé si han disparado o no. Nosotros estábamos con lo nuestro, ya teníamos bastante y, de que han disparado, me lo habéis comentado los periodistas. Yo no me he enterado, explicó Blach, quien, sin embargo, no descartó que el ruido en la zona les impidiese escuchar los disparos tal y como alega el Ministerio.
Blach explicó que, a su entender, no se produjo ningún enfrentamiento entre la Armada y los piratas, en contra de lo que defiende Defensa. Que yo sepa no hubo disparos, no hemos visto nada de eso y yo afirmaría que no ha disparado nadie. Ya tenían suficiente con custodiarnos a nosotros, matizó. Sin embargo, el propio Blach insistió en el abundante ruido reinante en la zona en el momento de la liberación. Con los ruidos nuestros que estamos virando el ancla, ruido de motos, pudo haber disparado y nosotros no nos hemos enterado, anunció.
No lo sé, nosotros estábamos con lo nuestro, que era suficiente para virar el ancla cuanto antes y tratar de meter a toda máquina para salir fuera. Yo he visto que llegaron los dos helicópteros y uno sí te puedo decir que llegó a la altura del último bote de piratas que iba para tierra, pero no he visto nada, no sé si ha disparado o no, zanjó el patrón del 'Alakrana'.
ADVERTENCIA DE LOS PIRATAS
Según explicó, los minutos posteriores a que los piratas abandonasen el pesquero fueron muy tensos ya que los propios secuestradores les advirtieron de que había otro pesquero tailandés con otro grupo de piratas. Los piratas que estaban a bordo del nuestro nos decían que en cuanto nos soltasen nos iban a coger, yo se lo hice saber a las fragatas, mandaron los helicópteros. En cuanto saltaron los dos últimos piratas al bote, ya vinieron los helicópteros a darnos cobertura y las fragatas. Pitando han venido, por eso me extraña que hayan disparado nada, relató.
El patrón recordó que en cuanto avisó, los dos helicópteros llegaron por atrás, en cinco minutos y que más tarde llegaron la Méndez Núñez y la Canarias. Yo les advertí de que nos estaban diciendo los piratas que en cuanto levantásemos el ancla que le diésemos a toda máquina que nos querían coger los otros. Yo tenía que estar informándole al comandante de la fragata, aún estaba un pirata en la escala y ya le estaba diciendo a las fragatas que se acercasen cuanto antes por si acaso, explicó.
El tiempo que tardaron las fragatas en acudir a escoltar al 'Alakrana' fue de unos diez minutos o así. Aparte de eso, como el otro pesquero, el tailandés, tenía los botes en el agua y nosotros estábamos bastante cerca, sería muy fácil que subiesen otros piratas al bote y en cinco minutos se pondrían al lado nuestro porque con un motor fueraborda, se ponían en nada en cinco o cuatro minutos, por eso yo pedía rapidísimo que nos diesen cobertura los helicópteros y así lo hicieron, anunció.
En cualquier caso, Ricardo Blach admitió que todo es muy confuso. No crees lo que está pasando, los piratas te dicen incluso que en cuanto metas el ancla le des a toda máquina, que te pueden coger otros. Te están diciendo eso, imagínate tú, lo mal que lo estás pasando, los nervios llegan a todo el mundo, y más a mí, que el capitán estaba fuera, en el alerón, para decirme cuando el ancla estaba arriba y yo estaba dentro, atendiendo todo para largarnos pitando, recordó.
REPARTO DEL DINERO
Sobre el reparto del dinero, Blach tampoco sabe con certeza cómo fue distribuido. No lo sé, la verdad es que no sé si ha habido dinero, si lo repartieron. Yo estaba viendo un periódico que nos mandaron por Internet y me sorprende un montón de cosas que se escriben ahí, dijo.
En cuanto al supuesto desembarco de tres marineros en una de las fases más tensas de la negociación, Blach confirmó que al final no desembarcaron. A nosotros nos metieron en la sala de máquinas, a ellos en un bote, nosotros estuvimos abajo más o menos media hora y cuando subimos, los compañeros ya no estaban y después teníamos dudas sobre si todo ese paripé que hicieron era verdad, pero tampoco teníamos el 100 por cien de certeza que estaban a bordo.
Por este motivo, Blach recordó como le preguntaba al cocinero acerca de si había notado algo, si llevaban alguna comida escondida para arriba. Pero la comida que subían era para los piratas y entonces no sabíamos si alguna bandeja iba hacia ellos. Como no teníamos acceso a donde estaban ni desde abajo ni desde arriba, no había manera, añadió.
A este respecto, el cangués Manuel Nantes, que ejerce de engrasador en el 'Alakrana', confesó que le preocupa tanta vigilancia y que todavía desconocía si podría adaptarse bien a esta circunstancia. A ver como nos adaptamos, hasta que estemos allí no sé si lo llevaré bien o mal, aseguró.
Nantes apuntó que a lo mejor la peligrosidad también aumenta al tener personal armado a bordo y opinó que este tipo de iniciativas resuelven de manera temporal el problema de la piratería pero mantuvo que el Gobierno debería de encontrar soluciones permanentes.
ESTADO DE ANIMO
A pesar de todo, Freire coincidió con el resto de su tripulación al señalar que parte hacia el Indico un poco más tranquilos al disponer de seguridad privada y que su familia comparte esa confianza añadida que aporta la vigilancia con la que contarán por primera vez.
El capitán desveló que los tripulantes del 'Alakrana' están bien y dijo que confían en poder encontrarse con ellos en Puerto Victoria, donde esperan un encuentro mucho más emotivo de lo habitual.
Igualmente, relató que han vivido el secuestro con mucha angustia y con el factor añadido de que el relevo se produce poco después del secuestro. Nos hemos librado por dos semanas, perfectamente podíamos ser nosotros los que estuviéramos allí, recordó.
Asimismo, informó que hay mucha suciedad en el barco y que antes de echarse a la mar tendrán que reponer material de trabajo, víveres y las herramientas informáticas que se llevaron los piratas tras la liberación.
Por último, tanto Freire como Nantes aseguraron que desconocían si los corsarios llegaron a bajar o no a algún marinero a tierra. Este último apuntó a la posibilidad de que fuera una estrategia de los piratas para acelerar el proceso y opinó que si fue así, salió bien.
DECLARACIONES DEL PATRÓN SOBRE EL RESCATE
Además, el patrón del atunero vasco 'Alakrana', Ricardo Blach, detalló en declaraciones que, tras el rescate de la tripulación, uno de los dos helicópteros que acudió a la zona salió detrás de los piratas sobrevolando su posición, aunque, según explicó, no se escucharon disparos. Yo de disparos no he visto nada, ni he oído nada. Me parece que no, aseguró.
Te confirmo que uno de los helicópteros voló sobre los piratas porque tampoco estaban tan lejos, estaban entre tierra y nosotros.
Puedo confirmar que uno de los helicópteros voló por encima de los piratas, eso seguro, pero yo no sé si han disparado o no. Nosotros estábamos con lo nuestro, ya teníamos bastante y, de que han disparado, me lo habéis comentado los periodistas. Yo no me he enterado, explicó Blach, quien, sin embargo, no descartó que el ruido en la zona les impidiese escuchar los disparos tal y como alega el Ministerio.
Blach explicó que, a su entender, no se produjo ningún enfrentamiento entre la Armada y los piratas, en contra de lo que defiende Defensa. Que yo sepa no hubo disparos, no hemos visto nada de eso y yo afirmaría que no ha disparado nadie. Ya tenían suficiente con custodiarnos a nosotros, matizó. Sin embargo, el propio Blach insistió en el abundante ruido reinante en la zona en el momento de la liberación. Con los ruidos nuestros que estamos virando el ancla, ruido de motos, pudo haber disparado y nosotros no nos hemos enterado, anunció.
No lo sé, nosotros estábamos con lo nuestro, que era suficiente para virar el ancla cuanto antes y tratar de meter a toda máquina para salir fuera. Yo he visto que llegaron los dos helicópteros y uno sí te puedo decir que llegó a la altura del último bote de piratas que iba para tierra, pero no he visto nada, no sé si ha disparado o no, zanjó el patrón del 'Alakrana'.
ADVERTENCIA DE LOS PIRATAS
Según explicó, los minutos posteriores a que los piratas abandonasen el pesquero fueron muy tensos ya que los propios secuestradores les advirtieron de que había otro pesquero tailandés con otro grupo de piratas. Los piratas que estaban a bordo del nuestro nos decían que en cuanto nos soltasen nos iban a coger, yo se lo hice saber a las fragatas, mandaron los helicópteros. En cuanto saltaron los dos últimos piratas al bote, ya vinieron los helicópteros a darnos cobertura y las fragatas. Pitando han venido, por eso me extraña que hayan disparado nada, relató.
El patrón recordó que en cuanto avisó, los dos helicópteros llegaron por atrás, en cinco minutos y que más tarde llegaron la Méndez Núñez y la Canarias. Yo les advertí de que nos estaban diciendo los piratas que en cuanto levantásemos el ancla que le diésemos a toda máquina que nos querían coger los otros. Yo tenía que estar informándole al comandante de la fragata, aún estaba un pirata en la escala y ya le estaba diciendo a las fragatas que se acercasen cuanto antes por si acaso, explicó.
El tiempo que tardaron las fragatas en acudir a escoltar al 'Alakrana' fue de unos diez minutos o así. Aparte de eso, como el otro pesquero, el tailandés, tenía los botes en el agua y nosotros estábamos bastante cerca, sería muy fácil que subiesen otros piratas al bote y en cinco minutos se pondrían al lado nuestro porque con un motor fueraborda, se ponían en nada en cinco o cuatro minutos, por eso yo pedía rapidísimo que nos diesen cobertura los helicópteros y así lo hicieron, anunció.
En cualquier caso, Ricardo Blach admitió que todo es muy confuso. No crees lo que está pasando, los piratas te dicen incluso que en cuanto metas el ancla le des a toda máquina, que te pueden coger otros. Te están diciendo eso, imagínate tú, lo mal que lo estás pasando, los nervios llegan a todo el mundo, y más a mí, que el capitán estaba fuera, en el alerón, para decirme cuando el ancla estaba arriba y yo estaba dentro, atendiendo todo para largarnos pitando, recordó.
REPARTO DEL DINERO
Sobre el reparto del dinero, Blach tampoco sabe con certeza cómo fue distribuido. No lo sé, la verdad es que no sé si ha habido dinero, si lo repartieron. Yo estaba viendo un periódico que nos mandaron por Internet y me sorprende un montón de cosas que se escriben ahí, dijo.
En cuanto al supuesto desembarco de tres marineros en una de las fases más tensas de la negociación, Blach confirmó que al final no desembarcaron. A nosotros nos metieron en la sala de máquinas, a ellos en un bote, nosotros estuvimos abajo más o menos media hora y cuando subimos, los compañeros ya no estaban y después teníamos dudas sobre si todo ese paripé que hicieron era verdad, pero tampoco teníamos el 100 por cien de certeza que estaban a bordo.
Por este motivo, Blach recordó como le preguntaba al cocinero acerca de si había notado algo, si llevaban alguna comida escondida para arriba. Pero la comida que subían era para los piratas y entonces no sabíamos si alguna bandeja iba hacia ellos. Como no teníamos acceso a donde estaban ni desde abajo ni desde arriba, no había manera, añadió.
