Desde la colonia lamentan las prisas en la obligación de acreditar la identidad

‘Los emigrantes no somos tontos’

Recuento del voto emigrante en Ourense. (Foto: Xesús Fariñas)
Sentimientos encontrados entre los representantes de la colectividad española. Entre las escasas coincidencias, todos critican que la obligación de presentar un documento identificativo se haya realizado con tan poco tiempo que apenas han podido enterarse. Pero después, algunos piensan que se inicia un camino para recortar derechos a los emigrantes, ya que no les resulta fácil acreditar su identidad. Otros creen que quienes no han enviado las fotocopias ha sido por comodidad. El debate está abierto.
‘Se veía venir’. El consejero general de la Emigración por Alemania, Julio Molina, asegura que el descenso en la participación es una de las consecuencias del requisito de acreditar la identidad de los votantes con el DNI o el pasaporte. Molina asegura que la medida ‘no causa ningún problema’ a la diáspora en Europa -donde todo el mundo tiene alguno de los dos documentos-, pero en América se ha revelado como un obstáculo en muchas ocasiones insalvable. ‘Esta medida ha sido lo mismo que decir a América que no vote’, lamenta este consejero que afirma que ‘la gente comienza a estar desencantada. Este ha sido el primer paso para que no podamos votar en ninguna cita electoral’.

Sin embargo, la hasta hace poco tiempo compañera por Alemania, Esther del Río, cree que ‘si alguien no es capaz de hacer una fotocopia para votar, quizás no tenga interés por quien le va a gobernar’. Del Río coincide con su compañero Molina en que ‘en América es más difícil contar con estos documentos’, pero cree que si descendió la participación se debe a que ‘no tendrían los documentos en regla, o porque no les interesa la política gallega’. También es muy crítico con la caída en la participación el presidente de la Coordinadora de Asociaciones Gallegas y del Partido Popular en Alemania, Ramiro Vieito, quien confirmó que ‘nos han llegado muchas cartas a favor y en contra del nuevo requisito’. Pero Vieito asegura que ‘mucha gente si tuviera que pagar el giro por votar no lo haría y tiraría las papeletas a la basura, aunque después son los primeros en exigir a los Gobiernos que se forman en España’. El responsable ‘popular’ considera que para evitar que se repitan situaciones similares hay que ‘luchar por el voto en urna’. Además, aboga por un sistema especial para la diáspora, en el que las elecciones comiencen antes y las urnas se vayan desplazando de ciudad en ciudad. ‘En Suiza es fácil establecer este sistema, porque es una miniatura de país; pero en Alemania, la colonia está muy dispersa en una superficie muy grande’. Vieito asegura que el resultado ‘era de prever’ por la maquinaria electoral puesta en marcha por el PSOE. ‘Nosotros nos cansamos de recorrer el país y de enviar cartas para, después, ver que sólo acudían 50 personas a cada mitin’.

Los políticos, ‘ausentes’

Sin embargo, la consejera por Holanda, Emilia Hernández achaca el descenso de participación al desinterés de los políticos por acercarse a la colonia. ‘Fueron a Bélgica, Suiza y Alemania, pero aquí no se les ha visto ni en pintura’. La consejera holandesa considera que ‘si la gente no siente que forma parte de algo importante, de que van a poder influir con su voto, no van a participar’. Hernández coincide con sus compañeros de Alemania en que la exigencia de identificarse los votantes no tiene porque ser entendida como un ataque a la participación de la diáspora. ‘Si tienes interés por participar y no encuentras demasiadas dificultades, lo haces’. Sin embargo, no descarta que en América ‘sobre todo la gente mayor’ haya podido tener dificultades para lograr los documentos o hacerles copias.

Para el consejero por Francia, Luis Iglesias, que un 30% de los sufragios se hayan quedado sin computar ‘es una aberración’. Iglesias Roldán cree que en la base del problema se encuentra que ‘fue una decisión apresurada y nosotros no sabíamos lo que teníamos que hacer’. El consejero galo no se mostró en contra de ‘cualquier medida que quiera demostrar que nuestro voto es transparente’, pero insiste en que ‘estas decisiones no se pueden tomar deprisa y corriendo. Nos cuesta mucho animar a votar, ahora tenemos que recuperar la confianza de la gente en que su voto vale’.

Desde Marruecos, el consejero Rafael Castillo la exigencia de esta documentación ‘es una medida de castigo’ porque aunque en Europa y Marruecos es fácil contar con DNI o pasaporte ‘en América puede ser más difícil’. Para el consejero marroquí ha sido ‘incomprensible’ que no se aceptase la inscripción en el registro consular. ‘A la larga, como se sigan poniendo dificultades la gente se va a inhibir. Como no estén muy implicados en los partidos políticos no van a votar. Es trágico, pero la mayoría van a pensar ‘no me compliquen la vida’.

En Argentina, país que acoge a más de 300.000 españoles con derecho a voto, las últimas elecciones han servido para pulsar el interés de la colectividad por participar en la vida política española. La consejera de la emigración Maite Michelón insiste en que ‘lo más importante es que sigamos teniendo derecho a votar. Cada uno que escoja a quien quiera, pero que no nos quiten la ilusión’. Michelón no se explica la polémica por la solicitud de acreditaciones. ‘La gente es muy cómoda y se ha negado a entregar este documento. Es una pena, porque no se comportan igual cuando tienen que pedir una pensión’, lamenta antes de asegurar que ‘sin apoyos también va a ser difícil poner en marcha el voto en urna, porque la sensación que queda es que nadie recorrerá distancia alguna para introducir su voto’.

‘Los emigrantes no somos tontos y votamos a quien comprobamos que gestiona mejor nuestras necesidades’, señala desde Brasil el consejero Casto Vieitez. Vieitez señala que en su país ‘hay mucha gente que nunca ha podido viajar y no cuentan con pasaporte, del DNI, ni hablamos’. Para el ‘brasileño’ ‘esta petición provoca la sensación de que no interesa que votemos’. Vieitez no estar en contra de este requisito, sino contra la premura con la que se ha puesto en marcha. Respecto la alternativa del voto en urna, recuerda que en países como EE.UU, Brasil o Australia, harían falta centenares de mesas para poder ejercer este derecho’.

De ‘auténtico desastre’ calificó la reciente cita electoral Antonio Fidalgo, consejero por Cuba. Este ourensano afirmó que ‘tanto mi hijo como yo aún estamos esperando que llegue el sobre para votar’. De Cuba llegaron muchos sobres con fotocopias del registro civil, que al final fueron desestimados. ‘Se nos dijo que valía este documento y ahora no sirvió para nada. La gente está desanimada. Ya no acude a votar con la misma ilusión que tenía hace años’.

Para Fidalgo, ‘al final la comisión electoral hizo más caso a la presión de los partidos políticos que al derecho de los españoles del exterior para votar, y, aún por encima, tomó las decisiones a última hora’.

El consejero ‘cubano’ alertó a los partidos políticos de que ‘estas elecciones van a tener consecuencias. Por un lado están preocupados por pedirnos el voto, pero después nos complican que podamos participar’.


Te puede interesar