Un grupo de trabajo de los gobiernos español y portugués examina las pruebas piloto con usuarios reales, hasta ahora satisfactorias, para compatibilizar los sistemas electrónicos de pago con telepeaje, ha informado hoy el Ministerio de Fomento.
Las pruebas piloto comenzaron el pasado 1 de octubre tras una primera fase en la que se ha comprobado la compatibilidad técnica de los sistemas de telepeaje en ambos lados de la frontera.
Los dos países tratan de favorecer así la interoperatividad de los sistemas de pago tras la entrada en vigor en 2010 en Portugal de mecanismos de peajes en autovías que anteriormente eran gratuitas.
Así, clientes del servicio de peajes portugués Vía Verde están circulando por la autopista AP-9, mientras que clientes de Ressa y Novacaixagalicia lo hacen por Brisa -Autoestradas de Portugal- de manera satisfactoria.
El pasado 1 de octubre comenzaron las pruebas piloto en Galicia y en el norte de Portugal, ha explicado el departamento de Fomento.
Los trabajos para facilitar la movilidad entre los dos países arrancaron tras un acuerdo entre la ministra de Fomento, Ana Pastor, y el ministro luso de Economía y Empleo, Álvaro Santos Pereira, que acordaron en febrero trabajar conjuntamente para buscar soluciones a la reforma acometida en 2010.
Desde entonces, algunas autovías portuguesas se convirtieron en carreteras de peaje con sistema de cobro electrónico automático y sin estaciones de peaje.
Esta reforma suscitó numerosas quejas entre la población y los transportistas españoles que viajan a Portugal debido a las dificultades para acceder a los complicados sistemas de pago, que penalizan a aquellos usuarios que utilizan esporádicamente esas infraestructuras .
Los dos países tratan de favorecer así la interoperatividad de los sistemas de pago tras la entrada en vigor en 2010 en Portugal de mecanismos de peajes en autovías que anteriormente eran gratuitas.
Así, clientes del servicio de peajes portugués Vía Verde están circulando por la autopista AP-9, mientras que clientes de Ressa y Novacaixagalicia lo hacen por Brisa -Autoestradas de Portugal- de manera satisfactoria.
El pasado 1 de octubre comenzaron las pruebas piloto en Galicia y en el norte de Portugal, ha explicado el departamento de Fomento.
Los trabajos para facilitar la movilidad entre los dos países arrancaron tras un acuerdo entre la ministra de Fomento, Ana Pastor, y el ministro luso de Economía y Empleo, Álvaro Santos Pereira, que acordaron en febrero trabajar conjuntamente para buscar soluciones a la reforma acometida en 2010.
Desde entonces, algunas autovías portuguesas se convirtieron en carreteras de peaje con sistema de cobro electrónico automático y sin estaciones de peaje.
Esta reforma suscitó numerosas quejas entre la población y los transportistas españoles que viajan a Portugal debido a las dificultades para acceder a los complicados sistemas de pago, que penalizan a aquellos usuarios que utilizan esporádicamente esas infraestructuras .
