La empresa, que perdió su participación por la 'operación acordeón', alega que se le "ocultó" información
El Juzgado de Primera Instancia número 2 de A Coruña celebrará los próximos 10 y 11 de julio el juicio de la demanda presentada por Hierros Añón contra el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) y NCG Banco tras perder su participación en la entidad a consecuencia de la 'operación acordeón' aplicada en la misma.
La Justicia admitió a trámite, en marzo de 2013, la demanda del empresario Manuel Añón Rey, propietario de Hierros Añón, con la que trata de salvar los 25 millones de euros que aportó al capital de la entidad financiera en 2011.
Este miércoles, se celebró en el Juzgado de Primera Instancia número 2 de A Coruña, la audiencia previa de cara al juicio, que ha quedado fijado para el 10 de julio, a las 9,30 horas, cuando tendrán lugar las testificales y el día 11 de julio, a la misma hora, día en el que están previstas las periciales.
En la audiencia, las partes han solicitado que se admitiese como prueba diversa documentación, entre ellas noticias de prensa en las que, según el letrado de Hierros Añón, "lejos del deterioro" de la entidad, se aludía a su "solidez y solvencia" lo que constataría que su cliente fue "víctima de un engaño doloso".
Esta documentación no fue, sin embargo, admitida por la jueza, que sí ha aceptado las testificales de dos empleados de Novagalicia Banco que desde Hierros Añón rechazaban. La demandante ha pedido también que el juicio se esclarezca si por parte de la entidad y del FROB se "omitió deliberadamente" trasladar a su cliente "cualquier detalle" sobre la necesidad del "ajuste contable" que se aplicó.
Frente a esta tesis, los letrados del FROB y de la entidad han defendido que el citado "ajuste" ya se recogía en una auditoría de las cuentas de 2010. Además, han alegado que la presencia del administrador de Hierros Añón, Edelmiro Añón, como miembro del consejo consultivo de Banco Sabadell Gallego, evidenciaría "su conocimiento del sector financiero".
'OPERACIÓN ACORDEÓN'
En su momento, fuentes de la empresa indicaron que Añón sintió "absolutamente engañado" cuando, en diciembre de 2012, en la entidad se ejecutó una 'operación acordeón', que consistió en que se redujo a cero el capital para hacer, simultáneamente, una ampliación.
En este proceso, que se produjo al inyectarse las ayudas procedentes de la UE a NCG Banco, la veintena de empresarios gallegos que habían hecho una aportación conjunta de 70 millones de euros vieron reducirse a cero su inversión y varios de ellos optaron por acudir a la vía judicial para reclamar su dinero.
Añón había aportado 25 millones de euros a la entidad tras lograr un acuerdo con NCG por el cual esta le compraba al empresario la participación que tenía en la Corporación Novacaixagalicia. El pacto suponía que el dueño de Hierros Añón adquiriría un uno por ciento del banco.
