El vecino de Nigrán fue capturado in fraganti entrando por un ventanuco de la parte trasera de la vivienda ubicada en San Pedro
Agentes de la Guardia Civil detuvieron in fraganti en la madrugada de ayer a un vecino de Nigrán cuando presuntamente se disponía a efectuar un robo en la casa parroquial de San Pedro de la Ramallosa por séptima vez. El primero de los hechos denunciados se remontan a principios del mes de marzo, momento en el que el párroco llevó a cabo la primera denuncia. Los actos notificados ante el Instituto Armado constatan sustracciones de entre 50 y 500 euros, un ordenador portátil, además de una caja fuerte y un baúl forzado. Se trata de un joven de la zona de 20 años de edad que responde a las iniciales A.C.R., y que cuenta con un amplio historial delictivo, entre los que destacan una treintena de robos en vehículos. Fue arrestado gracias a las investigaciones abiertas por miembros del Instituto Armado tras las reiteradas sustracciones detectadas por el párroco Xosé Manuel Lence en los últimos meses.
El supuesto autor fue sorprendido dentro del inmueble por el operativo desplegado en su interior, fruto de las sospechas de un nuevo intento de robo. Tras su detención los efectivos constataron que entraba a través de un ventanuco ubicado en la parte trasera de la vivienda, que desmontaba y volvía a montar al finalizar los actos delictivos. Además fue interceptado con guantes y con las llaves de la iglesia en su poder.
El detenido pasó a disposición del juzgado de guardia en la mañana de ayer y quedó en libertad a la espera de ser investigado por un presunto delito de robo continuado. Los actos delicitivos se centraron en estancias dedicadas a Cáritas, dentro de la casa rectoral y en la propia iglesia.
