Ante la huelga del sector del transporte de mercancías por carretera, el delegado del Gobierno, José Miñones, ha anunciado que se va a "reforzar la presencia policial", de forma que ya "son más de 2.000 agentes" actuando en Galicia y se realizan "400 acompañamientos a diferentes transportistas", puesto que las empresas "están solicitando esa ayuda". "No vamos a tolerar que se produzca lo que estamos viendo estos días de coacción a los que sí quieren trabajar", sentencia.
Precisamente, Miñones ha censurado que el paro "minoritario" está "actuando de forma violenta y con coacción". "Hay que lanzar un mensaje de que no se pueden afectar los servicios esenciales como se están afectando ahora mismo", afirma. "Cualquiera tiene derecho a parar, pero no impedir que otros trabajen", deja claro.