'Si no hicimos más fue porque no pudimos o porque no supimos, no porque no lo hubiésemos intentado'. Con esta frase que sonó a disculpa cerró Alberto Núñez Feijóo su intervención en el acto que lo entronizó en el Auditorio de Santiago como candidato del PP a la presidencia de la Xunta por segunda vez.
Tres años y medio después de asumir el poder, delante de unos 1.500 dirigentes y simpatizantes del PP, Feijóo volvió a prometer que Galicia será la primera comunidad que salga de la crisis y enfile la senda del crecimiento. 'Si fuimos los primeros en conseguir equilibrio en las cuentas, ahora también seremos los primeros en iniciar la senda del crecimiento'. Hace tres años también se había comprometido a acabar con el paro nada más llegase a San Caetano. En la anterior proclamación como candidato estuvo arropado por la plana mayor del partido en Madrid con Mariano Rajoy a la cabeza. Ayer, lo acompañaron Ana Pastor, ministra de Fomento, los cuatro presidente provinciales del PPdeG, el expresinente Fernández Albor, los miembros de su gobierno, alcaldes, simpatizantes del partido e incluso el expopular ferrolano Juan Fernández. Génova se quedó en Madrid y Feijóo pasó de largo por los recortes que ha acometido el Gobierno central, aunque sí mencionó a Rajoy para calificarlo como 'el primer militante de este gran partido'.De Ana Pastor dijo que es 'una ministra militante para Galicia'.
Ante una legislatura cimentada en la contención del déficit, pero famélica de grandes proyectos, Alberto Núñez Feijóo, insistió en ponerse de ejemplo para el resto de comunidades: 'Si la pregunta es si seremos capaces de tener un déficit como laUE, la respuesta es Galicia...' Para Feijóo Galicia también es la respuesta para 'pagar facturas' a pesar de las denuncia de impagos de constructores, concellos y hospitales; 'hacer hospitales' que o están en proyecto o no son más que un esqueleto; en una 'apuesta educativa' que se contrapone con el recorte de profesorado, cierre de escuelas, como denuncian los sindicatos, y eliminación de 'preescolar na casa..' Pero la parroquia popular estaba entregada al líder. 'Si la pregunta es si seremos capaces de superar la crisis, la respuesta está en Galicia', aunque el presidente de la Xunta no entró en cómo lo hará si gana.
Los presidentes provinciales y Alfonso Rueda fueron los encargados de avisar del peligro por los gobiernos de coalición; de la llegada del comunismo; de eses 'partidiños que quieren el minifundismo', como señaló Carlos Negreira; y del líder del PSdeG, 'que no lo quieren ni ellos y se le ha hecho un favor adelantando las elecciones'. Feijóo también advirtió de que Galicia está por encima de 'líderes espontáneos y ocasionales' y se comprometió a 'reducir el número de diputados'. Para lisonjear al candidato, Manuel Manuel Baltar tiró de Otero Pedrayo y de Martin Luther King . A Xosé Manuel Barreiro se le fue la mano invocando en dos ocasiones a Castelao para ensalzar a Feijóo, al que calificó como 'el Fraga del siglo XXI'. Feijóo se emocionó y amenazó con una lágrima. Pero se quedó en promesa.
Ante una legislatura cimentada en la contención del déficit, pero famélica de grandes proyectos, Alberto Núñez Feijóo, insistió en ponerse de ejemplo para el resto de comunidades: 'Si la pregunta es si seremos capaces de tener un déficit como laUE, la respuesta es Galicia...' Para Feijóo Galicia también es la respuesta para 'pagar facturas' a pesar de las denuncia de impagos de constructores, concellos y hospitales; 'hacer hospitales' que o están en proyecto o no son más que un esqueleto; en una 'apuesta educativa' que se contrapone con el recorte de profesorado, cierre de escuelas, como denuncian los sindicatos, y eliminación de 'preescolar na casa..' Pero la parroquia popular estaba entregada al líder. 'Si la pregunta es si seremos capaces de superar la crisis, la respuesta está en Galicia', aunque el presidente de la Xunta no entró en cómo lo hará si gana.
Los presidentes provinciales y Alfonso Rueda fueron los encargados de avisar del peligro por los gobiernos de coalición; de la llegada del comunismo; de eses 'partidiños que quieren el minifundismo', como señaló Carlos Negreira; y del líder del PSdeG, 'que no lo quieren ni ellos y se le ha hecho un favor adelantando las elecciones'. Feijóo también advirtió de que Galicia está por encima de 'líderes espontáneos y ocasionales' y se comprometió a 'reducir el número de diputados'. Para lisonjear al candidato, Manuel Manuel Baltar tiró de Otero Pedrayo y de Martin Luther King . A Xosé Manuel Barreiro se le fue la mano invocando en dos ocasiones a Castelao para ensalzar a Feijóo, al que calificó como 'el Fraga del siglo XXI'. Feijóo se emocionó y amenazó con una lágrima. Pero se quedó en promesa.
