El Parlamento admitió ayer a trámite, tras rechazar el PPdeG las enmiendas a la totalidad de los grupos de la oposición, el proyecto de ley de inclusión social de Galicia, que permitirá compatibilizar la Renta de Integración Social (Risga) con trabajos esporádicos o de poca cuantía, entre otros aspectos.
La portavoz del PSdeG en el debate, Carmen Gallego, consideró que se trata de 'un proyecto tardío que tiene pocos compromisos' -había quedado pendiente de la anterior legislatura por la convocatoria electoral-, y que resulta 'contradictorio' con las acciones de gobierno en Galicia y en España. Además, criticó que 'desprecia' a las administraciones locales. 'Llega con casi cinco años de retraso', insistió y señaló que, desde que se planteó la reforma, la situación ha cambiado. Además, avanzó que los socialistas presentarán enmiendas parciales y que se basarán en la petición de que se habilite 'de manera inmediata un fondo de emergencia contra la pobreza', que se implique a ayuntamientos y ONG en el plan y que quede garantizada la financiación para cumplir con los derechos subjetivos que se reconocen.
REBLANDECER CORAZONES
Los grupos de la oposición coincidieron en que el proyecto 'llega tarde' y no está pensado para el momento económico actual.
Así, el representante de Alternativa Galega de Esquerda (AGE), Juan Fajardo, inició su intervención reflexionando sobre lo adecuado de la hora -pasadas las 14,00 horas, cuando habitualmente se interrumpiría la sesión para comer- para debatir sobre este asunto y deseó que la sensación de hambre 'reblandezca el corazón de los diputados del PP', sobre los que dijo que 'parece que desconocen la realidad'.
Aunque admitió que poder compatibilizar Risga y empleo es 'un avance', criticó aspectos como que 'no se le reconoce el derecho a todas las personas' y que la norma es 'profundamente xenófoba' y deja fuera a quienes no tengan la residencia legal. Además, retó a la conselleira a demostrar que puede vivir un año con 4.792 euros, que es la aportación básica de la Risga. Está por debajo de los 7.800 euros al año que se consideran el límite de pobreza en España, dijo, y acusó al PP de querer 'repartir limosna' y reclamó una renta 'que pueda garantizar lo básico'.
Por su parte, la portavoz del BNG en el debate, Carme Adán, quien coincidió con AGE en la reclamación de una 'renta mínima, sin exclusiones de ningún tipo', recordó que 'este texto no garantiza una renta mínima a toda la ciudadanía gallega.
En la presentación del texto, con la misma redacción que antes de la convocatoria electoral, la conselleira de Traballo e Benestar, Beatriz Mato, señaló que el objetivo de la futura ley es ser 'un verdadero instrumento de inclusión social'.
REBLANDECER CORAZONES
Los grupos de la oposición coincidieron en que el proyecto 'llega tarde' y no está pensado para el momento económico actual.
Así, el representante de Alternativa Galega de Esquerda (AGE), Juan Fajardo, inició su intervención reflexionando sobre lo adecuado de la hora -pasadas las 14,00 horas, cuando habitualmente se interrumpiría la sesión para comer- para debatir sobre este asunto y deseó que la sensación de hambre 'reblandezca el corazón de los diputados del PP', sobre los que dijo que 'parece que desconocen la realidad'.
Aunque admitió que poder compatibilizar Risga y empleo es 'un avance', criticó aspectos como que 'no se le reconoce el derecho a todas las personas' y que la norma es 'profundamente xenófoba' y deja fuera a quienes no tengan la residencia legal. Además, retó a la conselleira a demostrar que puede vivir un año con 4.792 euros, que es la aportación básica de la Risga. Está por debajo de los 7.800 euros al año que se consideran el límite de pobreza en España, dijo, y acusó al PP de querer 'repartir limosna' y reclamó una renta 'que pueda garantizar lo básico'.
Por su parte, la portavoz del BNG en el debate, Carme Adán, quien coincidió con AGE en la reclamación de una 'renta mínima, sin exclusiones de ningún tipo', recordó que 'este texto no garantiza una renta mínima a toda la ciudadanía gallega.
En la presentación del texto, con la misma redacción que antes de la convocatoria electoral, la conselleira de Traballo e Benestar, Beatriz Mato, señaló que el objetivo de la futura ley es ser 'un verdadero instrumento de inclusión social'.
