La red de tráfico de drogas desarticulada entre O Salnés (Pontevedra) y Gijón se salda con la detención de 7 personas y la incautación de 65 kilos de cocaína, ocultaba la sustancia estupefaciente en un doble fondo de una furgoneta `camperizada` y en un trastero alquilado en Gijón, según ha informado la Policía Nacional, que se refiere a este grupo de presuntos delincuentes como "una de las redes más potentes de distribución de cocaína del norte de España".
Las investigaciones de la llamada Operación Lumebo se iniciaron en el pasado mes de abril, cuando se comprobó que una persona a la que relacionaban con una organización de narcotráfico, se había "independizado" y que estaba "liderando una nueva red". Asimismo, los agentes detectaron la presencia de vehículos y personas identificadas como transportistas de droga por la zona del Salnés.
Así, se estableció un dispositivo de seguimiento sobre un vehículo del que se sospechaba que estaba siendo usado para transportar cocaína, que se recogía en esa comarca de la provincia de Pontevedra.
El vehículo, una furgoneta `camperizada` con un doble fondo habilitado para ocultar la droga, fue interceptado en una zona de aparcamientos en Gijón (Asturias), y en su interior se encontraron 50 kilos de cocaína.
Por otra parte, fueron intervenidos otros 15 kilos de cocaína y 7,5 kilos de hachís, que estaban escondidos en un trastero en esa ciudad asturiana, que había sido alquilado por la mujer que conducía la furgoneta. La actuación policial se saldó con 7 detenciones, la de Gijón y otras seis en la provincia de Pontevedra.
Casi 2 millones de euros y joyas
Asimismo, se realizó un registro en la vivienda del considerado `cabecilla` del grupo, donde se encontró casi un millón de euros (gracias a la intervención de un perro de la Unidad Canina de A Coruña), y en otros inmuebles fueron localizados otros 400.000 euros en efectivo y numerosas joyas.
La Policía también solicitó el bloqueo de cuatro inmuebles que están a nombre de los investigados, y que están valorados en más de 350.000 euros, así como cuentas y productos en ocho entidades financieras.
El pasado fin de semana pasaron a disposición del juzgado de instrucción número 5 de A Coruña seis de los arrestados, y el magistrado ordenó el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza para tres de ellos. Los otros tres quedaron en libertad (dos de ellos con obligación de comparecer quincenalmente en los juzgados). Todos están investigados por un supuesto delito contra la salud pública y, además, a dos de ellos se les atribuye también un supuesto delito de blanqueo de capitales.
