El director general de Augas de Galicia, José Luis Romero Valeiras, imputado por el desastre ecológico en el embalse de A Fervenza que provocó la mortandad de miles de peces, afirmó hoy que el organismo que preside actuó con la máxima urgencia nada más tener conocimiento del problema.
El pasado 10 de noviembre miles de ejemplares de trucha y peces aparecieron muertos en el embalse de A Fervenza en el río Xallas, explotado por Ferroatlántica, al reducirse drásticamente el nivel del agua de la presa, que llegó a estar por debajo del 1 por ciento de su capacidad.
Romero Valeiras prestó declaración en la mañana en el Juzgado de Instrucción de Corcubión en relación con este procedimiento.
Junto al director general de Augas de Galicia también estaba citado como imputado el subdirector de Proyectos y Programas de esta sociedad, Francisco Alonso.
El juez que instruye el caso los considera posibles responsables al no haber controlado los niveles del pantano y originar una drástica reducción de las aguas del embalse.
A su salida esta mañana del Juzgado de Corcubión, Romero Valeiras manifestó que se reafirmaba en las declaraciones realizadas cuando aconteció el problema, subrayando que los operarios de Augas de Galicia actuaron con la máxima urgencia y nada más tener conocimiento del problema.
El procedimiento abierto por el Juzgado de Instrucción de Corcubión ha interrumpido de momento el informe interno de Medio Ambiente sobre este desastre ecológico, según dijeron fuentes de la Consellería, que indicaron que dicha investigación sobre la mortandad de los peces queda solapada por la vía judicial.
Medio Ambiente mantiene abierta una segunda línea de investigación, que aún no tiene fecha de conclusión y que pretende indagar sobre la gestión que Ferroatlántica hizo del embalse, un expediente que determinará la sanción que podría llegar a imponerse a la empresa del grupo Villar Mir.
La Consellería mantiene abierta una línea de trabajo al respecto, que sostiene que la única culpable de la bajada de los niveles de capacidad del embalse es Ferroatlántica por el uso indebido que realizó del agua para mantener llena la presa de producción eléctrica que tiene en el río Xallas.
Romero Valeiras prestó declaración en la mañana en el Juzgado de Instrucción de Corcubión en relación con este procedimiento.
Junto al director general de Augas de Galicia también estaba citado como imputado el subdirector de Proyectos y Programas de esta sociedad, Francisco Alonso.
El juez que instruye el caso los considera posibles responsables al no haber controlado los niveles del pantano y originar una drástica reducción de las aguas del embalse.
A su salida esta mañana del Juzgado de Corcubión, Romero Valeiras manifestó que se reafirmaba en las declaraciones realizadas cuando aconteció el problema, subrayando que los operarios de Augas de Galicia actuaron con la máxima urgencia y nada más tener conocimiento del problema.
El procedimiento abierto por el Juzgado de Instrucción de Corcubión ha interrumpido de momento el informe interno de Medio Ambiente sobre este desastre ecológico, según dijeron fuentes de la Consellería, que indicaron que dicha investigación sobre la mortandad de los peces queda solapada por la vía judicial.
Medio Ambiente mantiene abierta una segunda línea de investigación, que aún no tiene fecha de conclusión y que pretende indagar sobre la gestión que Ferroatlántica hizo del embalse, un expediente que determinará la sanción que podría llegar a imponerse a la empresa del grupo Villar Mir.
La Consellería mantiene abierta una línea de trabajo al respecto, que sostiene que la única culpable de la bajada de los niveles de capacidad del embalse es Ferroatlántica por el uso indebido que realizó del agua para mantener llena la presa de producción eléctrica que tiene en el río Xallas.
