La reunión podría ser mañana, después de la conversación que ayer mantuvo con ellos el presidente de la Xunta
La conselleira de Medio Rural, Rosa Quintana, ha expresado hoy su "disposición" a mantener una reunión con representantes del sector lácteo, que podría ser mañana, después de la conversación que ayer mantuvo con ellos el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo.
Quintana insistió en declaraciones a los informadores en que el Ejecutivo autonómico entiende "perfectamente" la situación que atraviesa el sector y reiteró que se encuentra abierta a la reunión que los ganaderos han demandado.
Preguntada por la decisión de los ministros europeos de liberar una partida de 500 millones para ayudas, la conselleira manifestó estar relativamente satisfecha y calificó la reunión de los responsables de agricultura de Estados miembros de la UE de "buen trabajo", porque su decisión va a suponer "ayudar, desde luego, a corto plazo, a todas aquellas explotaciones que estén atravesando momentos de dificultad".
No obstante, añadió que esta medida se suma al resto de las que ya están en marcha desde el Gobierno y la propia Xunta y anunció que durante esta semana se estudia "y se mirará cómo se cierran nuevas fórmulas de intervención en el mercado", como desean los ministros de España, Francia, Italia y Portugal, que podrían suponer elevar el precio de intervención, como demandan los ganaderos.
Tras resaltar que en la UE se ha reconocido que ningún país ha puesto sobre la mesa tantas medidas como España, recordó que está en marcha la tramitación de la orden ministerial de ayuda de 300 euros por vaca, así como que el próximo jueves el Consello de la Xunta aprobará la moratoria de dos años para los préstamos concedidos para planes de mejora, que se suma a la de un año que implantará el Estado.
Por ello, apuntó que, "tanto la Xunta de Galicia, como el Gobierno central, están acreditando que están del lado del sector, que creen en este sector, que creen que es un sector estratégico", como "así se lo puso de manifiesto ayer mismo el presidente de la Xunta a los representantes".
Sobre el acuerdo en Francia de los tres eslabones de la cadena para lograr un precio sostenible, Quintana dijo que precisamente lo que pretende la Ley de la Cadena Alimentaria es "transparentar" la conformación del precio.
"Lo que se hizo en Francia fue sentar a las tres partes para intentar llegar a unos acuerdos de conseguir un precio sostenible y eso mismo es lo que se esta intentando hacer tanto en Galicia como en España", reiteró.
La conselleira expresó también su confianza en que "el próximo jueves, en la reunión que haya en el Ministerio entre el sector productor, la industria y la distribución, sean capaces de conseguir ese acuerdo que permita la construcción de valor en torno a un producto, que mantenga un precio sostenible para el ganadero y evite estas situaciones de crisis que se están viviendo en este momento".
Preguntada si la administración garantizará el cumplimiento de estos posibles acuerdos, la responsable de Medio Rural apuntó que "todas las normas que se están desarrollando son para poner en marcha esa construcción del precio, esa transparencia en la cadena, para ver dónde se quedan los beneficios", algo en lo que trabaja la administración y que "responde a las expectativas que las organizaciones agrarias han puesto de manifiesto".
También sostuvo que se "redoblarán" los esfuerzos para evitar la venta a pérdidas y la utilización de la leche como producto reclamo e informó de la existencia de "una aplicación informativa que se conoce como "ofertómetro", que salta cuando los precios de la leche en el lineal alcanzan un precio determinado que entendemos que es una venta a pérdidas".
La conselleira reiteró que "se están redoblando todos los esfuerzos y, por eso, necesitamos ese acuerdo del jueves en Madrid entre industria, distribución y sector, para que nadie pueda estar engañando a la hora de construir el precio".
Aunque reconoció que los controles y las sanciones administrativas tienen burocracia y son lentos, pidió a los ganaderos "que no desesperen, porque, desde luego, estoy convencida de que vamos en la buena dirección".
Del reparto de los 500 millones de la Unión Europea, contó que no podía hacer una estimación de lo que le correspondería a Galicia y concluyó que se defienden "los argumentos que permitan que la mayor parte de esas ayudas recaigan en quienes tienen que recaer, que es en quienes lo están pasando peor en estos momentos".
