Sigue acordonada casa con cadáver calcinado a la espera de inspección ocular

La casa del municipio pontevedrés de Valga donde ayer fue hallado el cadáver calcinado y con signos de violencia de su propietario, un hombre de 92 años, sigue acordonada y con el cuerpo del anciano en su interior a la espera de que especialistas trasladados desde Madrid hagan la inspección ocular.
Fuentes de la Guardia Civil consultadas han señalado que hasta que se practique esta inspección y la autopsia al cadáver no se descarta ninguna hipótesis, aunque el móvil que más fuerza cobra a estas alturas de la investigación es el de un robo con violencia.

Agentes de la Benemérita hallaron el cadáver ayer por la tarde en una vivienda unifamiliar del municipio pontevedrés de Valga, en la parroquia de Cordeiro, lugar de O Forno, con evidentes síntomas de que la muerte se haya producido de forma violenta.

Fuentes de la investigación han informado a Efe de que el cuerpo sin vida de la víctima presentaba heridas causadas por un arma blanca y han precisado que posteriormente el agresor o agresores trataron de calcinar el cadáver, que sufre importantes quemaduras.

El descubrimiento del cadáver se produjo después de que los vecinos de la víctima alertaran de que llevaban algún tiempo sin verlo y que no respondía a las llamadas, lo que no era habitual, por lo que pensaron que podía haber sufrido alguna indisposición y necesitar ayuda.

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