ATRACO MORTAL EN VIGO

La tesis policial confirma que el herido en Vigo no tenía chaleco

photo_camera Vicente Alló, el subinspector de Policía herido, durante una prueba de su club de bicicleta

Balística aún no pudo definir el número de impactos del tiroteo en el atraco de la pasada semana

La investigación policial continúa abierta una semana después del asalto de “El escayolista” a una sucursal de Abanca en O Calvario que se saldó con la muerte del propio atracador y de la policía viguesa Vanessa Lage.

Su compañero, que continúa evolucionando bien de sus heridas, ya en su casa, recordó con enorme cariño en su página de Facebook a su compañera fallecida y le dio las gracias por haberle salvado la vida.

Según los datos que se van conociendo de la investigación, y como se dijo desde el primer minuto, ninguno de los dos agentes llevaba el chaleco puesto, aunque probablemente no le habría valido de nada a la policía fallecida por un disparo en el cuello. Su compañero recibió dos balas, que realizaron un extraño desplazamiento, lo que confundió durante un tiempo a los investigadores. Una entró por un hombro y salió por el otro, en tanto que la que le produjo las lesiones más graves, que le llevaron al límite vital, entró por el pecho y le rompió al menos una costilla, que a su vez se le clavó en el pulmón, provocando un neumotórax, colapso del órgano que puede significar la muerte por asfixia. La misma bala salió por el otro hombro. Por tanto, el subinspector tenía dos orificios de entrada y otros dos de salida, y no cuatro impactos de entrada, como se señaló al principio.



Impactos de bala

En cuanto al número de disparos sobre el atracador, realizados por la segunda patrulla que intervino, cuyos miembros están siendo auxiliados psicológicamente por el fuerte impacto emotivo y la tensión, el número de balas que pudo haber recibido estaría en un máximo de cinco o seis, probablemente menos.

El informe no es definitivo, ya que falta comprobar todos los aspectos de la balística antes de garantizar una conclusión. Entre otros aspectos, los técnicos y la Policía Científica está haciendo un recuento de los proyectiles y sobre todo de su trayectoria. Se cree que pudo haber hasta 37 durante la refriega, pero sólo una pequeña parte habrían impactado en los cuerpos de las tres personas.

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