Un tope de 60 días para ser operado en el Sergas y un máximo de 45 días de espera para obtener las pruebas del especialista quedarán fijadas por norma con la Lei de Garantías de Prestacións Sanitarias que ayer aprobó el Gobierno gallego tras la reuniónsemanal del Consello de La Xunta. En el texto se establece que serán las 'sociedades científicas e profesionais da saúde' las que dictaminen los tiempos en función 'da gravidade' de las patologías, según anunció Alberto Núñez Feijóo.
Entre las novedades de la norma que será remitida en a la Cámara gallega en las próximas fechas, además de la libre elección del médico de familia, también se podrá escoger al pediatra, al personal de enfermería y el centro hospitalario cuando un enfermo quiera cambiar. La segunda opinión médica quedará 'blindada' y se acortan los plazos del procedimiento, que serán de 10 días para resolver el trámite y 15 para que el paciente obtenga el segundo diagnóstico, que suele requerirse en las enfermedades más graves, precisó el presidente gallego. .
Feijóo incidió en que con el impulso a esta ley cumple con un promesa del programa electoral. 'Acabouse reducir a lista de espera en número, interesa a gravidade', subrayó el mandatario gallego. Cuando se le preguntó si no se sigue ya esa pauta, contestó que es un tema 'sobre o que leva debatendo moito tempo non só no Sergas, senón en todos os servizos de saúde' y que acostumbraba a regularse en función de 'acordos de xestión, pero agora farase por lei'. Además, se amplían las facilidades para dejas escritas las voluntades previas.
El presidente restó importancia a las críticas del Consello Económico y Social (CES) sobre la inexistencia de una memoria económica, esgrimiendo que 'houbo un voto particular dos sindicatos que no momento non presentaron alegacións' y destacó que la esta ley impide que se privatice la sanidad.
Feijóo incidió en que con el impulso a esta ley cumple con un promesa del programa electoral. 'Acabouse reducir a lista de espera en número, interesa a gravidade', subrayó el mandatario gallego. Cuando se le preguntó si no se sigue ya esa pauta, contestó que es un tema 'sobre o que leva debatendo moito tempo non só no Sergas, senón en todos os servizos de saúde' y que acostumbraba a regularse en función de 'acordos de xestión, pero agora farase por lei'. Además, se amplían las facilidades para dejas escritas las voluntades previas.
El presidente restó importancia a las críticas del Consello Económico y Social (CES) sobre la inexistencia de una memoria económica, esgrimiendo que 'houbo un voto particular dos sindicatos que no momento non presentaron alegacións' y destacó que la esta ley impide que se privatice la sanidad.
