Una psicóloga de la Xunta examinará al niño de 11 años que había sido agredido por un compañero en el colegio Santa Cristina de Lavadores para determinar si está o no en condiciones de volver al colegio, al rechazarse un informe de una psicóloga contratada por los padres. Fue una propuesta del Fiscal de Menores que aceptaron ayer estos padres en una comparecencia de casi dos horas en la que primero entró el niño solo y a continuación los progenitores.
La familia acudió al completo a los juzgados, con sus dos hijos, de 11 y 9 años, y descubrió que el principal interés del Fiscal de Menores era determinar si hubo o no absentismo escolar, como denunció la Xunta, puesto que desde que se produjo la agresión, hace más de un mes, el niño agredido no volvió a clase y últimamente tampoco va al colegio su hermano pequeño porque los padres temen que lo señalen los compañeros y profesores.
El padre manifestó a la salida que 'sería lo último que me acusaran de absentismo, llevo desde el primer día buscándole un centro y la Xunta no lo soluciona', insistió el padre, quien recordó que también tienen un profesor particular.
Según indicó, el fiscal les explicó que él no tiene potestad para un cambio de centro, que corresponde a la Consellería de Educación, sino que se encargará de determinar si hubo absentismo o no, después de la denuncia remitida por la Xunta y teniendo en cuenta que la escolarización es obligatoria hasta los 16 años. Los padres dijeron que el fiscal quiso conocer la veracidad de las noticias publicadas en los medios de comunicación y se mostraron decepcionados por no poder explicar los detalles del caso.
Una de las principales quejas de los padres del menor es que la Xunta no les atiende correctamente y ayer supieron que hay documentación entregada por Educación al Fiscal de Menores que ellos no habían visto nunca y que por tanto no pudieron recurrir ni estar informados de las resoluciones. El fiscal rechazó hablar con los periodistas y se limitó a decir que está investigando. Ayer también acudió a la Fiscalía de Menores la directora del colegio Santa Cristina, y los funcionarios evitaron que se encontrase con estos padres.
El padre del niño indicó que, si se determina el absentismo, ellos tendrán que 'rendir cuentas' porque, aunque el niño volviera al colegio, pasó varias semanas sin acudir. 'Nos dijo que va a perder el curso y que es una negligencia absoluta', apuntó el padre.
El padre manifestó a la salida que 'sería lo último que me acusaran de absentismo, llevo desde el primer día buscándole un centro y la Xunta no lo soluciona', insistió el padre, quien recordó que también tienen un profesor particular.
Según indicó, el fiscal les explicó que él no tiene potestad para un cambio de centro, que corresponde a la Consellería de Educación, sino que se encargará de determinar si hubo absentismo o no, después de la denuncia remitida por la Xunta y teniendo en cuenta que la escolarización es obligatoria hasta los 16 años. Los padres dijeron que el fiscal quiso conocer la veracidad de las noticias publicadas en los medios de comunicación y se mostraron decepcionados por no poder explicar los detalles del caso.
Una de las principales quejas de los padres del menor es que la Xunta no les atiende correctamente y ayer supieron que hay documentación entregada por Educación al Fiscal de Menores que ellos no habían visto nunca y que por tanto no pudieron recurrir ni estar informados de las resoluciones. El fiscal rechazó hablar con los periodistas y se limitó a decir que está investigando. Ayer también acudió a la Fiscalía de Menores la directora del colegio Santa Cristina, y los funcionarios evitaron que se encontrase con estos padres.
El padre del niño indicó que, si se determina el absentismo, ellos tendrán que 'rendir cuentas' porque, aunque el niño volviera al colegio, pasó varias semanas sin acudir. 'Nos dijo que va a perder el curso y que es una negligencia absoluta', apuntó el padre.
