Silvio Berlusconi culpa de la pérdida de votos registrada por su partido en las elecciones europeas a la venta de Kaká al Real Madrid y al escándalo formado por su mujer, Verónica Lario, en torno al caso Noemí Letizia.
Según publicó este martes el diario italiano Corriere della Sera, así lo habría explicado 'Il Cavaliere' a sus hombres de confianza la noche del lunes, tras analizar los resultados definitivos de los comicios.
El partido de Berlusconi, el Pueblo de la Libertad (PDL), no sólo no se hizo con la cuota ideal del 40-45% sino que, quedándose en poco más del 35%, perdió dos puntos con respecto a los resultados de las elecciones generales del año pasado.
Entre las causas contempladas por el 'premier' figuraría la abstención y la falta de unidad demostrada por su formación en la isla de Sicilia, que suele ser uno de los bastiones de su partido.
Pero, sobre todo, achaca la pérdida de votos al escándalo Noemí y a la posterior demanda de divorcio de su mujer, Veronica Lario, e incluso la venta de Kaká por parte del Milan al Real Madrid. Según Berlusconi, estos hechos habrían logrado eclipsar completamente la campaña electoral italiana y habrían hecho montar en cólera a miles de electores milanistas.
'En Sicilia hemos perdido más de 800.000 votos por culpa de los nuestros, que se pusieron a discutir, el resto me lo ha hecho perder mi mujer...', habría dicho Berlusconi a los suyos, según las declaraciones reconstruidas por el Corriere della Sera.
No le falta razón a Berlusconi. Noemí Letizia se convirtió en la gran estrella de la campaña electoral después de que la segunda mujer de Berlusconi, Veronica Lario, anunciara su petición de divorcio tras conocerse que 'Il Cavalieri' había acudido a la fiesta de su 18 cumpleaños.
En la jornada electoral del pasado domingo, Noemí acaparó todas las miradas después de que los Carabinieri cerraran el colegio electoral en el que la joven debía ejercer su derecho al voto sin tener que soportar los flashes de las cámaras y la presencia de curiosos.
Sin embargo, la joven napolitana que ha escandalizado a Italia por su poco clara amistad con el primer ministro no tiene intención de dedicarse a la política, según la revista italiana 'Tv, Sorrisi e Canzoni'. La joven, que votaba por primera vez este lunes en unas elecciones, aclaró: '¿La política? No va conmigo'.
'Tengo otras ambiciones', explicó Noemí, que respondió así a las declaraciones del cómico italiano 'Fiorello', quien había asegurado que si hubiera tenido que votar al político con la mejor campaña electoral, la hubiera votado a ella.
'La única cara que se ve estos días es la de Noemí, la de su madre, la de su padre, la de su ex novio y también el de su charcutero y su verdulero', había bromeado el humorista italiano.
El partido de Berlusconi, el Pueblo de la Libertad (PDL), no sólo no se hizo con la cuota ideal del 40-45% sino que, quedándose en poco más del 35%, perdió dos puntos con respecto a los resultados de las elecciones generales del año pasado.
Entre las causas contempladas por el 'premier' figuraría la abstención y la falta de unidad demostrada por su formación en la isla de Sicilia, que suele ser uno de los bastiones de su partido.
Pero, sobre todo, achaca la pérdida de votos al escándalo Noemí y a la posterior demanda de divorcio de su mujer, Veronica Lario, e incluso la venta de Kaká por parte del Milan al Real Madrid. Según Berlusconi, estos hechos habrían logrado eclipsar completamente la campaña electoral italiana y habrían hecho montar en cólera a miles de electores milanistas.
'En Sicilia hemos perdido más de 800.000 votos por culpa de los nuestros, que se pusieron a discutir, el resto me lo ha hecho perder mi mujer...', habría dicho Berlusconi a los suyos, según las declaraciones reconstruidas por el Corriere della Sera.
No le falta razón a Berlusconi. Noemí Letizia se convirtió en la gran estrella de la campaña electoral después de que la segunda mujer de Berlusconi, Veronica Lario, anunciara su petición de divorcio tras conocerse que 'Il Cavalieri' había acudido a la fiesta de su 18 cumpleaños.
En la jornada electoral del pasado domingo, Noemí acaparó todas las miradas después de que los Carabinieri cerraran el colegio electoral en el que la joven debía ejercer su derecho al voto sin tener que soportar los flashes de las cámaras y la presencia de curiosos.
Sin embargo, la joven napolitana que ha escandalizado a Italia por su poco clara amistad con el primer ministro no tiene intención de dedicarse a la política, según la revista italiana 'Tv, Sorrisi e Canzoni'. La joven, que votaba por primera vez este lunes en unas elecciones, aclaró: '¿La política? No va conmigo'.
'Tengo otras ambiciones', explicó Noemí, que respondió así a las declaraciones del cómico italiano 'Fiorello', quien había asegurado que si hubiera tenido que votar al político con la mejor campaña electoral, la hubiera votado a ella.
'La única cara que se ve estos días es la de Noemí, la de su madre, la de su padre, la de su ex novio y también el de su charcutero y su verdulero', había bromeado el humorista italiano.
