La justicia británica podría investigar a Pete Doherty por la muerte en extrañas circunstancias de su amigo Mark Blanco. Ambos acudieron a una fiesta en la que, según algunos presentes, Doherty y otros asistentes vejaron a Blanco, que acabó cayendo por un balcón. Otras versiones apuntan a que el joven, que era actor, saltó del balcón en un arrebato de creatividad.
Que las fiestas a las que acude Pete Doherty deben de ser un desmadre es algo que ya sabíamos, aunque la muerte de un asistente parece demasiado incluso para las juergas del líder del grupo Babyshambles.
Doherty acudió a una fiesta el sábado 21 en casa de su amigo y agente literario Paul Roundhill, a la que también estaba invitado Mark Blanco, un joven actor que quería convencer a Doherty para que acudiera a ver su obra de teatro y así darle más relevancia en los medios.
Al final de la noche, Blanco cayó por el balcón del piso, sufriendo heridas de gravedad en la cabeza que acabaron causándole la muerte. Una primera investigación policial decidió que su caída había sido accidental y 'no sospechosa', y descartó la implicación de los asistentes a la fiesta en la muerte del joven.
Así, según afirmó un responsable de Scotland Yard, 'en estos primeros momentos de la investigación, no parece que hubiera terceras personas relacionadas con el incidente. Sin embargo, las pesquisas continúan'.
Pero la familia de Blanco ha seguido presionando para que otros especialistas estudiasen el caso, consiguiendo que un experto en neurobiología les diera un diagnóstico muy diferente de lo ocurrido. 'Es extremadamente improbable que Blanco saltara deliberadmente (del balcón)', ha declarado el neurólogo Richard Wassersug.
'Dada la naturaleza de sus heridas, las dos explicaciones que puede haber es que fue empujado por encima de la barandilla o que estaba inconsciente y cayó', continúa Wassersug.
Por su parte, el abogado de la familia añade que 'hemos pasado de considerar lo ocurrido un accidente o un suicidio, a un asesinato'.
DIFERENTES VERSIONES DE LOS ASISTENTES A LA FIESTA
Ahora, la lucha de versiones la encaran los asistentes a la fiesta, quienes se dividen en partidarios o detractores de Blanco. Por un lado, los que defienden al fallecido aseguran que Doherty y sus amigos no paraban de meterse con el joven, pues 'no le dejaban sentarse y quemaron su sombrero. Otra persona le pegó tres puñetazos'.
Sin embargo, el organizador de la fiesta, Paul Roundhill, lo ha negado todo y afirma que Blanco estaba muy emocionado ante el hecho de hablar con Doherty sobre su obra de teatro, algo que le alteró lo suficiente para saltar por el balcón, pese a que Doherty intentó calmarlo.
Según ha declarado Roundhill al diario The Sun, 'nadie sabe cómo se cayó por el balcón, pero creo que no fue accidental. Parece que fue un arrebato creativo lo que hizo que saltara'. Eso sí, Roundhill reconoce haber quemado el sombrero de Blanco, aunque dice que lo hizo 'para distraerle'.
Los amigos del joven fallecido no dan crédito a esta versión de los hechos e insisten en que Blanco fue dejado sólo en la calle, herido, tras desaparecerle sus gafas y su reloj de lujo. Y explican: 'parece que le habían pegado porque tenía muchos cardenales y huesos rotos', además, no creen que su amigo saltara por el balcón pues 'padecía vértigo severo'.
De cualquier manera, y pese a la gravedad de lo ocurrido, no parece que a Pete Doherty le afectara mucho la muerte de Mark Blanco. Esa misma noche, tras la fiesta, el líder de Babyshambles se fue con otros amigos al hotel Malmaison de Londres, donde siguieron de fiesta, causando daños de varios miles de euros en la habitación en la que se encontraban.
Doherty acudió a una fiesta el sábado 21 en casa de su amigo y agente literario Paul Roundhill, a la que también estaba invitado Mark Blanco, un joven actor que quería convencer a Doherty para que acudiera a ver su obra de teatro y así darle más relevancia en los medios.
Al final de la noche, Blanco cayó por el balcón del piso, sufriendo heridas de gravedad en la cabeza que acabaron causándole la muerte. Una primera investigación policial decidió que su caída había sido accidental y 'no sospechosa', y descartó la implicación de los asistentes a la fiesta en la muerte del joven.
Así, según afirmó un responsable de Scotland Yard, 'en estos primeros momentos de la investigación, no parece que hubiera terceras personas relacionadas con el incidente. Sin embargo, las pesquisas continúan'.
Pero la familia de Blanco ha seguido presionando para que otros especialistas estudiasen el caso, consiguiendo que un experto en neurobiología les diera un diagnóstico muy diferente de lo ocurrido. 'Es extremadamente improbable que Blanco saltara deliberadmente (del balcón)', ha declarado el neurólogo Richard Wassersug.
'Dada la naturaleza de sus heridas, las dos explicaciones que puede haber es que fue empujado por encima de la barandilla o que estaba inconsciente y cayó', continúa Wassersug.
Por su parte, el abogado de la familia añade que 'hemos pasado de considerar lo ocurrido un accidente o un suicidio, a un asesinato'.
DIFERENTES VERSIONES DE LOS ASISTENTES A LA FIESTA
Ahora, la lucha de versiones la encaran los asistentes a la fiesta, quienes se dividen en partidarios o detractores de Blanco. Por un lado, los que defienden al fallecido aseguran que Doherty y sus amigos no paraban de meterse con el joven, pues 'no le dejaban sentarse y quemaron su sombrero. Otra persona le pegó tres puñetazos'.
Sin embargo, el organizador de la fiesta, Paul Roundhill, lo ha negado todo y afirma que Blanco estaba muy emocionado ante el hecho de hablar con Doherty sobre su obra de teatro, algo que le alteró lo suficiente para saltar por el balcón, pese a que Doherty intentó calmarlo.
Según ha declarado Roundhill al diario The Sun, 'nadie sabe cómo se cayó por el balcón, pero creo que no fue accidental. Parece que fue un arrebato creativo lo que hizo que saltara'. Eso sí, Roundhill reconoce haber quemado el sombrero de Blanco, aunque dice que lo hizo 'para distraerle'.
Los amigos del joven fallecido no dan crédito a esta versión de los hechos e insisten en que Blanco fue dejado sólo en la calle, herido, tras desaparecerle sus gafas y su reloj de lujo. Y explican: 'parece que le habían pegado porque tenía muchos cardenales y huesos rotos', además, no creen que su amigo saltara por el balcón pues 'padecía vértigo severo'.
De cualquier manera, y pese a la gravedad de lo ocurrido, no parece que a Pete Doherty le afectara mucho la muerte de Mark Blanco. Esa misma noche, tras la fiesta, el líder de Babyshambles se fue con otros amigos al hotel Malmaison de Londres, donde siguieron de fiesta, causando daños de varios miles de euros en la habitación en la que se encontraban.
