La moda se lleva en los pies

¿Cuál es la historia de SomosOcéano? SomosOcéano arrancó oficialmente el 7 de agosto de 2016 cuando se hizo la primera venta en la tienda online. Previamente hubo un trabajo de varios meses preparando la idea, buscando fábricas y proveedores. En 2015 me había quedado sin trabajo y tomé la decisión de ser mi propia jefa porque estaba cansada de hacer entrevistas de trabajo en donde no se valoraba todo lo que podía aportar; hice un estudio de mercado y un plan de negocio y vi que SomosOcéano podía tener futuro. Me lancé a emprender con mucha ilusión y mucha ignorancia por todo lo que supone sacar adelante una empresa. ¿Qué filosofía sigue la marca? Es moda atlántica: prendas atemporales, de estilo marinero, con colores que inviten a recordar el mar y con las que se puede saborear el norte. Queremos que sean de una alta calidad para que las prendas duren mucho y con patrones clásicos para que no caiga en una moda de usar y tirar. ¿Cómo fueron los inicios como emprendedores? Aunque traté de tenerlo todo muy pensado y con una estrategia clara gracias al plan de negocio todo saltó por los aires al poco tiempo. Fran era y es un apasionado de los calcetines de colores y medio en broma por darle el gusto de tener nuestros propios calcetines diseñé cuatro modelos, fabricamos sólo 400 pares y se agotaron en cuestión de semanas. Así que vimos el filón y nos volcamos con ese producto con el que no contábamos realmente. También tuvimos que rectificar lo que había trazado porque pensaba que únicamente se iba a vender online pero pronto muchas tiendas se empezaron a interesar por el producto y tuvimos que cambiar márgenes, revisar costes… Lo que decía, emprendí con mucha ilusión pero con una total ignorancia empresarial. ¿Qué perfil de cliente tenéis? Si viésemos nuestras estadísticas de seguidores en redes sociales veríamos que el target es una mujer de 25-45 años, gallega y con inquietudes por la sostenibilidad. ¡Lo curioso es que justo lo que más se vende en calcetines es la talla de hombre! Jugáis con elementos gallegos, que actualmente están muy de moda en toda España. ¿Por qué triunfan tanto? Una de las cosas que me hizo centrarme en motivos que recordasen al Atlántico arranca de una anécdota. Vi a una niña pequeña, monísima, de la mano de su abuela de camino a la playa con una gorra que decía “fuck”. Me quedé perpleja porque di por hecho que nadie a su alrededor le advirtió lo que llevaba y pensé que lo que tenía que llevar bordado esa gorra era “riquiña”, que era lo que era esa niña. Creo que queremos entender los mensajes que llevamos en nuestras prendas porque eso hace que nos sintamos más identificados. ¿Cómo surgen las colecciones? ¡Fran me rompe muchísimo la cabeza con los diseños que quiere que saquemos! Yo, que me dedico al diseño en sí, voy tomando notas tamizando las ideas y dándoles forma y color. Intentamos que sean tonos atractivos, que los patrones no sean enrevesados para que la prenda sea más versátil y nunca escatimamos en buscar el mejor algodón para que la calidad sea estupenda. Trabajamos con mucha antelación y tenemos que estar pensando siempre en los siguientes modelos. Ahora tenemos casi cerrada la primavera. ¿Cómo es diseñar calcetines? Como te comentaba fue un poco por broma ya que Fran es un fan de los calcetines diferentes e hicimos una tirada mínima por el gusto de sacarla al mercado. La jugada nos salió a pedir de boca y ahora es sin duda nuestro producto estrella. Es un artículo muy agradecido porque es un lienzo muy creativo en donde desarrollar infinidad de ideas. Estamos realmente orgullosos que de esa tirada “de broma” de 400 pares hemos pasado a fabricar cerca de 30.000 al año y tener unos 50 puntos de venta en toda España, y desde este año, en Francia, Italia, Suiza y Alemania. ¿Por qué han vuelto a ser importantes en los looks? Los calcetines tienen un fin físico, abrigarnos del frío, pero también estético que es mostrar nuestros gustos y personalidad. Tenemos muchos clientes que nos dicen que les encanta ese puntito de vestir serios con un traje y darse el homenaje de llevar unos calcetines con cangrejos de colores; es como salirse de ese uniforme impuesto. Lo que no toleramos es a esa gente que en pleno diciembre no viste calcetines, ¡s vais a morir de frío! ¡Poneos algo! (risas) ¿Qué papel han de jugar en la moda actual marcas como la vuestra? Aportar diversidad y opciones diferentes. Si todos vestimos con lo que nos propone el fast fashion se pierde pluralidad en la moda y puntos de vista distintos.