Nos adentramos en la primera semana de mayo y con ello cambian las posibilidades de lo que podemos cultivar en nuestro huerto. Este momento es importante porque debemos elegir qué vamos a cosechar en los próximos meses
“Abril aguas mil” dice el refrán, pero como ocurre en la mayoría de los casos, esto no es una ley que se cumpla al pie de la letra. Este mes de abril ha resultado ser excesivamente seco en comparación con otros años. Ciertamente, en la provincia de Ourense ha habido alguna que otra precipitación, teniendo niveles superiores al resto de la península, pero aún así, las medias son inferiores a las de años anteriores a estas alturas del año.
Esto se verá reflejado en los cultivos, pues si bien podemos mantener un nivel de riego de forma manual, a poco que nos descuidemos pueden echarse a perder en momentos críticos de su desarrollo.
Pero esta semana que viene abandonamos abril y nos adentramos en mayo, un mes idóneo para plantar una enorme cantidad de cultivos variados. Sin embargo, si esta condición de lluvias escasas se mantiene, deberemos estar muy atentos a los riegos, pues una falta de riego durante el desarrollo de algunas plantas puede causar que no lleguen a florecer, haciendo que no den fruto en la época de cosecha. Para evitar esto, deberemos programar el riego con antelación y estar muy pendientes de las previsiones meteorológicas.
Los cultivos que podremos plantar durante el mes de mayo son principalmente especies de la familia de las cucurbitáceas y de las solanáceas. En la familia de las cucurbitáceas nos podemos encontrar con el calabacín, la calabaza, el pepino, el melón y la sandía. Dentro de las solanáceas nos encontramos el pimiento, el tomate y la berenjena, ya que será tarde para la patata, que se debe cultivar a principios de la primavera. Además, también podremos plantar acelga, lechuga, zanahoria, fresa, puerro o espinaca. Dentro de las aromáticas también hay posibilidades, pues es el mes perfecto para plantar albahaca, perejil, orégano y romero. Algunas de estas especies, como la lechuga, la zanahoria o la espinaca, se pueden cultivar en cualquier época del año, pero las suaves temperaturas de la primavera favorecen un mejor crecimiento.
Las solanáceas son especies originarias, en su mayoría, de regiones de América del Sur y Centro América. Necesitan climas cálidos y mucha luz. El nombre de su familia, “solanácea” puede confundir a error, pues, a pesar de que requieren una gran cantidad de luz directa, su nombre viene de la palabra latina solamen, que quiere decir alivio y alude al empleo de algunas de sus especies como sedantes y narcóticos. Estas plantas contienen solanina, una sustancia que puede producir afecciones gastrointestinales si se consumen en dosis altas. Pero esta sustancia también le concede a estas especies propiedades fungicidas e insecticidas, reduciendo así las afecciones por estas plagas a los cultivos de esta familia. En medicina, la solanina también se usaba como anticonvulsivante, sedante y antigripal, aunque actualmente no está demostrada su utilidad para tratar estos síntomas, se sigue utilizando con fines homeopáticos.
Por otra parte, la familia de las cucurbitáceas tienen una alta necesidad hídrica, pues su fruto tiene un alto contenido de agua. Es muy importante vigilarlas bien porque por su fisionomía tienden a sufrir estancamiento hídrico, lo que significa que el agua no llega a infiltrarse en la tierra. Esto facilita que sufran afecciones por distintos hongos. Su nombre proviene de la palabra latina cucurbita, que significa calabaza. En general, son familias muy sencillas de cultivar, lo que hace que sea muy común encontrarlas en huertos caseros. Para que no sean consumidas antes de su maduración, poseen una sustancia llamada cucurbitacina, que tiene efectos laxantes y eméticos. Esta sustancia ha sido muy estudiada recientemente por su función antitumoral, ya que posee una toxicidad diferencial hacia las líneas celulares de tumores renales, cerebrales, y melanomas
Consultorio
A mi planta se le han puesto los bordes de algunas hojas de este color ¿Qué puedo hacer?
Gracias por su consulta. Por la foto que adjunta con la pregunta, parece que su calatea tiene el borde de una hoja marrón. Esto puede deberse a varias razones, todas ellas relacionadas con el clima. La calatea es una planta tropical bastante complicada de complacer, requiere mucha humedad y climas cálidos. Afortunadamente, parece que es un caso aislado y solo una hoja ha sido afectada. Si considera que su casa tiene un clima seco, pruebe a pulverizarla una vez cada dos días, ya que ahora se avecinan las temperaturas altas. Haga esto durante la mañana temprano, para que no se quemen las hojas en caso de que le dé luz de forma directa en algún punto del día.
Esta condición también puede deberse a que se la está regando con agua fría. Si éste es el caso, trate de usar agua más templada. En ocasiones esto puede causar conmoción en las raíces, sobre todo en plantas jóvenes o que se están adaptando a un nuevo entorno.
(Roberto Contreras - Ribadavia)
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